DISCURSO INAUGURAL
Fabián Labeau (1993)

El Doctor Huang se aclaró la voz y se preparó para hablar en la primera de las sesiones del Congreso. Se puso de pie y se dirigió al estrado, donde se tomó unos minutos para ordenar sus papeles.
      —Doctores, es para mí un honor inaugurar el XXXV Congreso Internacional sobre Investigaciones en Psicofarmacología. Agradezco la presencia del Doctor Jones, decano de la Universidad de Luna I y del Doctor García Hong, presidente de la Asociación Médica Planetaria.
      »Tradicionalmente, la apertura de este congreso comienza con la presentación de algún trabajo interesante o fuera de lo común. Cuando me retiré de la profesión, el año pasado, el Doctor Jones vino a verme y me preguntó sobre una teoría mía que vengo desarrollando en forma inconstante (cuando mi tiempo me lo ha permitido), en los últimos treinta años. Me dijo que sería una pena no exponer esta teoría mía, para que tal vez alguno de ustedes tome la antorcha y continúe con la tarea.
      »Como todos ustedes sabrán, yo era el Jefe del Area de Investigaciones Psicofarmacológicas de la Universidad de Filipinas hasta hace un año, cargo en el cual me sucede el Doctor Chapman. También soy Doctor Honoris Causa de Universidades en los seis continentes, un privilegio que me fue concedido tras acceder al título en cuestión de la Universidad Antártica Marambio, en junio último. Justamente, el trabajo que hoy presento fue gestado hace más de cincuenta años, cuando, en mi luna de miel, estuve en un magnífico hotel en Antártida, sector argentino. Allí conocí a uno de los pocos hombres que recorrió toda la Antártida en un trineo... tirado por perros. Me permito recordar a nuestros colegas más jóvenes que ese método de transporte era utilizado hasta mediados del siglo veinte, cuando la Antártida era aún casi virgen y aún no había signos de contaminación ambiental en ese hermoso continente.
      »Este colega estaba investigando las propiedades del compuesto RTA 2234 como generador de bloqueos neuronales y de cuadros de amnesia parcial. Cinco años más tarde ese compuesto se podía comprar en cualquier farmacia por unos pocos yens: fue la famosa Prilita. Muchos de ustedes la habrán estudiado junto con la talidomida y el dietiletil bestrol como ejemplos de drogas que en un principio se creyeron absolutamente perfectas, carentes de cualquier efecto adverso y muy útiles... hasta que comenzaron los reportes sobre malformaciones, muertes intraútero, muertes súbitas, amnesias globales y trastornos severos de la personalidad. La utilidad de esta droga (o su supuesta utilidad) era que producía una amnesia de hechos recientes. Los psiquiatras la utilizaban para "borrar" de la memoria los hechos traumáticos de sus pacientes, sobre todo si éstos eran recientes. Se la utilizaba en casos de víctimas de violaciones, ataques, accidentes, pérdidas familiares, etcétera. Luego se comercializó una versión más suave, el acetato de hidroxi-prilita, con el nombre genérico de Amnésix. Su efecto era fantástico: borraba selectivamente aquello que había perturbado nuestro equilibrio emocional durante las últimas veinticuatro horas. La propaganda, si la recuerdan, decía algo así como: "Si el día fue duro, tómate un Amnésix". La droga comenzó a comercializarse en 2007 y en el 2011 se retiró rápidamente del mercado, tras los casos de París, Londres y Caracas, en los cuales se demostró que la ingesta crónica de este compuesto producía un cuadro de euforia, seguida de depresión y manía. Los casos relatados en estas tres ciudades nos hablan de que las personas adquirían una fuerte tendencia a la megalomanía y luego, invariablemente, se volvían violentos.
      »Es famoso el caso del Profesor Dupuy quien en... —Consulta unos papeles— ...el 2008, el 12 de enero de 2008, entró a un colegio donde era docente y, estando en una de sus clases, cuando uno de sus alumnos, al parecer, no respondió a su pregunta, comenzó a gritar sin control, extrajo una ametralladora Ingram de su maletín y disparó contra todos los alumnos. Luego, se suicidó. Uno de los jóvenes, sobreviviente del ataque, consiguió recuperarse y testificó en la investigación posterior. Fue el único alumno de ese colegio que sobrevivió. Similares características tuvieron los hechos de Londres y Caracas. Violencia, muertos y heridos.
      »Doctores: no se asusten, no estoy aquí para hablarles de hechos horrorosos ni para recordales viejas historias policiales. Trato de llevarlos hacia el pasado, para que puedan apreciar hechos no descubiertos hasta ahora. Ruego a los más jóvenes que tengan paciencia con la exposición de este verdadero fósil viviente... —risas entre el auditorio— ...pero pronto verán qué relación existe entre todo esto.
      »He mencionado que la prilita, o más específicamente el compuesto RTA 2234, fue investigado hace cincuenta años. Esto es cierto, pero no crean que el compuesto no era utilizado con anterioridad. Lo que ocurre era que no estaba identificado. Un caso parecido ocurrió con el tabaco. Todos sus compuestos no fueron identificados hasta hace unos diez años. Si vemos el primer holograma...
      Tres metros al costado del estrado apareció una figura de dos metros de alto, que tomó la forma inconfundible de una representación molecular para estudiantes de química.
      —Esta es la molécula de prilita, el compuesto RTA 2234 original. Noten ustedes que es una molécula sencilla, con el agregado de una molécula de cobalto en posición trans. Ahora veremos el siguiente holograma...
      Un metro al costado de la anterior apareció otra forma similar.
      —Esta molécula es la de la versión más suave, la versión soft, de la anterior. Comprobarán ustedes que las semejanzas son obvias y que los cambios radican en el agregado de un acetato, que impide la absorción rápida, y de la hidroxilación de la molécula original. Les pido que recuerden específicamente esta particular disposición.
      »Retornemos nuevamente al período histórico. He dicho que la prilita fue sintetizada comercialmente en el 2007. Previo a esto, la droga era sintetizada por los laboratorios Harland (obviamente ya desaparecidos). En los registros figura que el compuesto original era producido por ingeniería genética, bajo la dirección del Doctor Simms. Pude conversar hace unos veinte años con el Doctor Simms, quien me relató cómo fueron esas investigaciones. En realidad el Doctor Simms buscaba un agente para combatir los cuadros de depresión por deprivación sensoria, que en aquella época de largos viajes interplanetarios disminuían notablemente el rendimiento de los astronautas. La comisión pro-desarrollo de Marte fue la que financió las primeros investigaciones. Lo importante de todo esto es que el Doctor Simms partió de cero en la investigación. Ignoraba la existencia de un compuesto similar, utilizado desde el año 1905.
      »Haremos ahora un paréntesis para decirles que mi afición por la historia es conocida por todos y que he publicado algunos libros, sobre todo en lo concerniente al siglo XX. Sus aspectos políticos y sociológicos son fascinantes y aún no del todo comprendidos. Tuvo dos guerras mundiales y miles de confrontaciones bélicas más o menos importantes, especialmente en el hemisferio Sur. Desde ese siglo es que estamos en la Era Atómica. Un siglo excepcional desde el punto de vista económico, con naciones inmensamente ricas y naciones extremadamente pobres. Lo que me llamó la atención, y aún no deja de sorprenderme, es la existencia de dos categorías de países: Sur y Norte, cuya división estaba casi perfectamente definida por el Trópico de Cáncer. Aunque les parezca mentira, los países del Sur eran los pobres...
      »En 1905 un químico suizo sintetizó el verde Swanson, un colorante extraído originalmente del alquitrán. Swanson intuyó que este descubrimiento podría tener ventajas económicas y patentó su hallazgo... y el método para obtenerlo. No se equivocó, ya que diez años más tarde era millonario, debido a que la patente de su colorante fue utilizada para imprimir billetes. En el año 1910 fundó un laboratorio químico en Alemania, donde produjo toda la tinta que se utilizó en los billetes de aquella época, gracias a una licitación poco clara. En la composición de las tintas de los billetes se utilizaban además el rojo Swanson, el negro Swanson y el azul Swanson, todos descubiertos por Thomas S.V. Swanson y fabricados con su método patentado. En 1911, varios países de Europa compraron los derechos para la producción de estas tintas, que se utilizaron hasta 1946. Esta fecha es importante, ya que marca la desaparición de este proceso de elaboración de tintas para papel moneda en Europa. Recordemos que las dos guerras más sangrientas de principios de siglo se llevaron a cabo en esta época. Pero Europa no fue la única que utilizó estas tintas: Los Estados Unidos compraron los derechos de producción de las tintas, aunque no para imprimir billetes, sino para papelería oficial. Esto fue en 1913. En 1920 el mercado de valores se desbarrancaba... un fenómeno que arrastró a otros muchos países. Curiosamente, la única dependencia del gobierno que utilizó estas tintas fue el Departamento del Tesoro. En 1928, la Química Swanson vendió derechos de fabricación a varios países: todos ubicados por debajo del trópico de Cáncer. Sin embargo, se varió el procedimiento de fabricación en algunos pasos, por razones económicas. La historia demuestra que esos países sufrieron guerras civiles, golpes de Estado, actos de violencia colectiva, invasiones y cuanto horror pueda ocurrírseles. Y continuaron utilizando este método de fabricación hasta 1998, época en la cual finalmente reemplazaron el esquema de fabricación del Doctor Swanson por el método actual, la síntesis biogenética.
      »Pero ¿qué era en realidad el método Swanson? Tuve acceso a la oficina de patentes de Lausana, Suiza, en un congreso que se realizó allí en el año 2028, y descubrí la patente que se utilizaba en los países del hemisferio Sur. El método extraía una sustancia del alquitrán con bastante eficacia... El siguiente holograma por favor... Cuya composición era ésta. Como podrán ver, no se parece en nada a la prilita, sin embargo este compuesto únicamente es estable cuando está en un medio líquido. Si se deseca y se somete a la acción del nitrógeno (el cual forma parte del aire ambiental en un 70%), la molécula se descompone y se forma el siguiente compuesto... Siguiente holograma, por favor... El cual ya tiene algo más de semejanza. Este compuesto, al cabo de cinco meses, aproximadamente, se transforma en... Siguiente holograma, por favor... 4 hidroxi-metil prilita. Creo que aquí a nadie le quedan dudas de la semejanza con el compuesto más suave, el famoso Amnésix. Sin embargo, he podido comprobar dos hechos significativos. Primero: este compuesto tiene una potencia amnésica 300 veces inferior, lo que lleva no a una amnesia en realidad, sino a un estado de "olvido" de las acciones pasadas. Por ejemplo, si yo me administrara este compuesto de forma crónica, comenzaría a sentir un estado de fatiga intelectual y emocional, con períodos de gran iniciativa personal y alteración de los hechos vividos, como si los mismos hubieran ocurrido hace diez años. Segundo: tarde o temprano se generará una respuesta violenta en un grupo, simplemente porque se sincronizarán los períodos de hiperactividad de varios individuos. El resto de la población se sentirá o bien indiferente (estado de fatiga emocional), o bien amenazado, y responderá de manera violenta. Pero estos hechos se producirían una vez cada seis a diez años, en promedio.
      »Para probar mi teoría, debía sintetizar este compuesto y probarlo en algún animal de experimentación. La síntesis del compuesto fue sencilla, ya que el método estaba descrito en la patente. Al cabo de dos meses teníamos una cantidad suficiente para nuestras experiencias. Los animales fueron un problema más serio. Ustedes conocen bien el elevado costo de un animal de experimentación y nosotros necesitábamos una colonia de animales aislados, para que pudieran vivir lo más naturalmente posible y, al mismo tiempo, poder estudiarlos en su ambiente natural. Mi título de Doctor Honoris Causa y mi amistad con el Doctor Da Fonseca me permitió hacer dicho experimento en la Universidad de Amazonia, donde funciona la Facultad de Etología (Comportamiento de los Animales) y pude disponer de una reserva de ciento quince macacos. Bien es sabido que los macacos tienen un sistema de jerarquía similar al de los humanos, con verdaderas "castas", "clanes" y el concepto de división del trabajo. Además, cada grupo tiene un único líder. Y como si fuera poco, se los puede entrenar para que realicen ciertos actos. En nuestro lote existían dos clanes perfectamente diferenciados. Mi asistente, el Doctor Obando, se encargó de prepararme el "papel" moneda: unos sobres de cartón azules, verdes, negros y rojos que cada macaco llevaba adosado al pecho, según el "clan". Se les enseño a frotar ese pedazo de cartón con las manos cada tantos minutos (60 habitualmente) o al escuchar una campana. Mi esposa, una etóloga aficionada, vigiló durante dos años esta experiencia, hasta que se suspendió el trabajo de campo, pues decidí comenzar otra línea de trabajo. Quince días después de finalizada la experiencia, y según me refirió el Doctor Obando, los macacos comenzaron una verdadera batalla entre ellos, más específicamente entre dos de los "clanes". Hubo ochenta macacos muertos y el pobre Doctor Da Fonseca sufrió un infarto (risas).
      »No publiqué los resultados finales del trabajo, aunque hice un artículo para la revista Behavior, en donde relaté lo sucedido. Por aquella época comenzaba mi jefatura en la Universidad de Filipinas, y nunca tuve tiempo de ordenar los hechos para presentarlos en forma de teoría.
      »¿Fueron las tintas y colorantes Swanson los responsables de los hechos violentos del siglo XX? Tal vez nunca sepamos la respuesta cierta, pero las evidencias muestran que tal vez así haya sido. Creo que este compuesto nunca fue del todo estudiado, ni siquiera por mí.
      »La Historia, sin embargo nos muestra que en los países donde se usó la primera variante del compuesto ocurrieron hechos trágicos: Guerras, genocidios... hechos horrorosamente violentos.
      »Los efectos de la segunda variante tienen características cíclicas, con golpes de Estado, derrocamientos, Guerras Civiles, atraso cultural, desastres económicos, pobreza. Factores todos que condicionan violencia, inestabilidad. Creo, Doctores, que una gran parte de la humanidad ha estado literalmente hablando, drogada por el dinero que circulaba por sus manos durante todo el siglo XX. El hemisferio norte se libró de ese compuesto en 1946, época en la cual muchos de los países sudamericanos, por ejemplo, eran considerados verdaderas potencias. Veinte años después se hallaban sumidos en la más absoluta pobreza... Podrá criticarse esta teoría mía diciendo que fueron otros los factores condicionantes de los hechos del siglo XX. Y tal vez sea cierto. Pero a veces miro el globo terráqueo y pienso. Pienso, señores...
      »Creo que me he excedido del tiempo asignado. Doy por finalizado mi discurso inaugural y bienvenidos al Congreso."
      »Buenas noches y gracias."

Una ovación despidió al Doctor Huang.



Fabián Labeau es un médico argentino, fanático de la CF, la fantasía y el terror, editor hace años —para la época la primera publicación de este cuento— de una revista en diskette para médicos residentes. En 1983 nos mostró su capacidad de imaginar con este cuento en forma de discurso. Si uno de los requisitos más importante a cumplir por un cuento de ciencia ficción es el de la credibilidad, pues bien, este lo cumple a muerte. Tanto que me dan ganas de correr a un bioquímico con uno de esos objetos tan comunes y tan necesarios que, como surge del texto, serían los culpables de tantas cosas malas que nos pasan... Todo parece pura ficción, pero...



Publicado originalmente en la revista Axxón número 47