20/Nov/03

Insectos como mascota

TEMAS: Biología, Zoología, Entomología, Insectos, Coleoptera, Phasmida, Coleópteros, Fásmidos, Mascotas

Cada vez más la gente tiene insectos como mascota. Quizás por la falta de espacio, quizás porque necesitan menos atención, quizás porque están de moda. O porque muestran algo diferente frente a sus amistades. O por lo que sea. La cosa es que las tiendas de animales han comenzado a instalar su sectores especializados en bichos palo, escarabajos, mántidos, además de los ya más habituales arácnidos. Incluso se comercian cucarachas, milpiés y ciempiés. Según la Organización de Consumidores y Usuarios de España, en ese país estas exóticas compañías ya se acercan en número al de perros y gatos.

Los veterinarios, enfrentados con extrañas e inmutables criaturas, han debido estudiar nuevas materias. ¿Qué necesita y cómo se cuida un gran cetónido (escarabajo) de África? ¿Qué pasa cuando se ponen tristes, inmóviles o no comen? ¿Qué debo darle de comer a mi milpiés? ¿Qué es ese parásito que camina por el lomo del bicho, con qué se cura?

"La mayoría de los veterinarios están especializados en perros y gatos, o, al menos, en mamíferos", asegura María Ángeles Orten, dueña de una tienda de animales en el Zoològic Tarraco. "En Tarragona sólo hay un veterinario especialista en animales exóticos, y nosotros enviamos a nuestros clientes directamente a él", añade.

La solución debía llegar, y la mayoría de los dueños de un animal de este tipo terminan convirtiéndose en verdaderos expertos. Al darse cuenta del desconocimiento que hay respecto a su ejemplar, comienzan a buscar información por su cuenta. Internet está repleta de páginas dedicadas a los distintos tipos de animales —la mayoría en inglés—, y se pueden encontrar allí todo tipo de descripciones, incluyendo algunas tremendamente detalladas y documentadas fotográficamente.

Japón lleva la delantera en este tema. Allí se pueden encontrar supermercados dedicados a las mascotas de seis, ocho y más patas, con productos en exhibición producidos masivamente, para venta comercial. Si algún día se termina de destruir la naturaleza en los países de África y Asia, incluso de América, porque hasta aquí vienen avanzando, Japón será el reservorio de fauna de insectos más grande, más complejo y completo del mundo. En miles de iniciativas privadas, comerciales y de museos, se están criando enormes cantidades de insectos. Especialmente los más llamativos, los más grandes y lo más raros.

Las técnicas aplicadas sorprenden y hasta causan gracia. Se han desarrollado incubadoras y artefactos de control de todo tipo. Hay cantidades de jaleas y mermeladas para alimentar escarabajos, en frascos con etiquetas coloridas que uno puede elegir como si lo hiciera para un hijo. Y si lo que uno busca es alojamiento, encontrarás primorosas cajas provistas de comodidades y prolijidad como para darle envidia a los hamsters de todo el mundo. En uno de estos mercados se pueden encontrar estanterías enteras llenas de troncos... ¿para qué? Bueno, muchos escarabajos son xilófagos (comen madera) y necesitan diferentes tipos de tronco, llegados de todo el mundo.

Los japoneses tienen dinero, y lo demuestran. Hace un tiempo se supo que se han pagado allí decenas de miles de dólares por un espécimen de coleóptero de tamaño un poco superior al normal. De hecho, se paga continuamente mucho dinero por estas piezas y por larvas de insectos que aún no se han logrado criar. Un nuevo "kit" de crianza (una prolija caja, con manual de instrucciones, alojamiento e intrumental, más los huevos, o la larva o larvas, y una porción de alimento para empezar) de una nueva especie es una cosa que puede significarle fortunas a quien logra lanzarla.