Noticias en Insectos de Argentina y el Mundo
Noticias de Insectos de Argentina y el Mundo - Más Noticias

28/Nov/03

Los insectos malos para la salud se propagan mucho más al talarse bosques y selvas

TEMAS: Biología, Zoología, Entomología, Conservacionismo, Insectos, Diptera, Dípteros, Culicidae, Mosquitos, Anopheles darlingi, Enfermedades, Malaria

Los insectos que transmiten la malaria crecen en número. Investigadores norteamericanos han advertido que la destrucción de la selva lluviosa del Amazonas está abriendo la puerta a una explosión de estos mosquitos. Tienen la esperanza de dejar en claro que los daños ambientales están aumentando las enfermedades humanas.

El equipo recogió 15.000 mosquitos en enjambres a lo largo de un camino de la selva en el noreste de Perú y fue haciendo un conteo para saber cuántos de éstos eran Anopheles darlingi (Diptera, Culicidae), la especie que inyecta el parásito palúdico en las venas humanas. Usando imágenes satelitales, relacionaron estos valores de recolección con el nivel de tala de árboles causado por los cultivos y por la construcción de aldeas.

Jonathan Patz y su equipo, de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore, Maryland, han llegado a la conclusión de que por cada aumento de un 1% en la tala de árboles se produce un alza del 8% en la cantidad de A. darlingi. Patz sugiere que el A. darlingi puede dominar a las otras especies porque prospera en estanques y pozos ubicados en lugares abiertos y al sol.

Patz tiene la esperanza de que este hallazgo sea tenido en consideración por quienes manejan el destino de las selvas. En este estudio, por ejemplo, se observó que la cantidad de insectos se dispara locamente una vez que se ha destruido un 30-40% de la selva. "Nuestra meta es prevenir [enfermedades] tan lejos como se pueda llegar", dijo.

El experto en malaria Phil Lounibos de la universidad de la Florida en Vero Beach está de acuerdo en que la tala de árboles puede aumentar los enjambres del A. darlingi. Pero señala que la primera oleada de esta especie se produjo en los años 90 después de la introducción de granjas que crían peces tropicales: "El problema no sería tan agudo si esta especie no hubiese sido importada."

Patz es parte de un creciente grupo de científicos que estudian el impacto del daño ambiental en la salud de animales y de seres humanos. Se le llama 'medicina conservacionista', un campo que cubre desde el impacto de la contaminación en el cáncer a la influencia del calentamiento global en la desaparición de anfibios que se está produciendo en todo el mundo.

La medicina conservacionista ha ganado un nuevo reconocimiento después de los brotes recientes del virus del Nilo Oeste (West Nile virus) y del síndrome respiratorio agudo severo (SARS), que pasaron a afectar a los seres humanos en parte debido a los cambios en el contacto con los animales. Estos acontecimientos son una advertencia, opina Peter Daszak, jefe del Consortium for Conservation Medicine, parte de Wildlife Trust, una entidad de bien público con base en Palisades, Nueva York.

Este consorcio de cinco instituciones académicas —incluyendo la universidad Johns Hopkins— impulsa para que se hagan más estudios que informen a quienes deben tomar decisiones de política conservacionista. El propio Daszak mismo está investigando si la urbanización o los cultivos han afectado la diversidad de pájaros y, por lo tanto, ha sido el disparador del traspaso del virus del Nilo Oeste desde los pájaros a los seres humanos.

Daszak y Patz están aguardando que se produzca en el 2005 el lanzamiento de un importante informe de Millennium Ecosystem Assessment, impulsado por las Naciones Unidas. Este grupo de científicos está ensamblando un cuadro de los cambios de ecosistemas y del impacto de estos cambios en la salud humana, orientado a informar a los gobernantes.

Mientras tanto, en marzo del 2004 se producirá un avance algo más pequeño, cuando se lance EcoHealth, un diario dedicado a este campo, además de un foro en línea para los investigadores que se llamará ecohealth.net. "Todo lo que observamos es cosa de sentido común", resume Daszak, "pero es increíble que estas cosas sean ignoradas tan masivamente."

Más información:
Lost forest fuels malaria