31/Jul/04
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Macabros gusanos en el fondo del océano
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Dos especies de gusanos descubiertos en oscuros fosos de las profundidades del mar podrían
rivalizar con las macabras bestias de nuestras pesadillas infantiles. Los científicos le
han dado nombre a un nuevo género, Osedax que en latín significa "devorador de huesos",
para incluir en él a estos gusanos, que medran excavando los huesos de los cadáveres hundidos
de las ballenas.
Los gusanos contienen bacterias que los ayudan a digerir las grasas y aceites de los
esqueletos de las ballenas. Este tipo de relación simbiótica nunca se había visto antes,
y puede representar un tipo de metabolismo completamente nuevo.
Los investigadores del Instituto de Investigación del Acuario de Monterey Bay (MBARI) en
Moss Landing, California, Estados Unidos, descubrieron una calavera de ballena que estaba
"cubierta de gusanos", cuando estaban buscando camadas de almejas en el canal de Monterey
Canyon, a unos 3.000 metros de profundidad.
Estos gusanos resultaron ser diferentes a todo lo que se había visto hasta ahora. Las
hembras de más o menos el groso de un lápiz y de unos centímetros de largo no
tienen ojos, bocas ni estómagos. Consisten en un saco de huevos como la envoltura de una
pelota, que se ramifica en un verdoso sistema de raíces.
Esas raíces ramificadas se extiende dentro del hueso de la ballena para extraer sus
grasas y aceites. Las bacterias simbióticas que viven dentro de las raíces descomponen
los lípidos, pero todavía no se sabe cómo es que los nutrientes son transferidos desde
los huesos a las bacterias y luego a los gusanos.
Metabolismo radical
Durante los últimos 15 años, los científicos han estado estudiando los cementerios de
ballenas, áreas en las que se han concentrado los esqueletos sumergidos de las ballenas
a lo largo de sus rutas migratorias, Pero hasta ahora todos los organismos que se
encontraban en los cadáveres hundidos de las ballenas utilizaban bacterias "quimiotróficas"
que los ayudan a capturar energía de las marismas ricas en sulfuros en las que caen los
huesos de las ballenas. Este es el mismo tipo de metabolismo que se encuentra en las
especies que se encuentran en los ventiladeros hidrotermales. Esas bacterias obtienen
sus nutrientes del sulfuro y del agua enriquecida con metano resultantes de la
actividad volcánica en el fondo del mar.
Los nuevos gusanos son los primeros animales conocidos que utilizan a las bacterias para
descomponer lípidos; bacterias como las que se encuentran en los surgentes de petróleo.
"Este es uno de los usos de bacterias por parte de invertebrados más novedosos que he
visto hasta el momento", dijo Shana Goffredi, bióloga marina del MBARI, quien reportó
el hallazgo en la revista Science esta semana. "Esto ha dirigido la evolución de este
animal. El gusano ha modificado su cuerpo para acomodar los simbiontes", dijo ella.
Pariente lejano
Los científicos se sintieron perdidos al querer identificar los gusanos en base a su
extraña anatomía, aunque luego el análisis de su ADN reveló que son parientes lejanos de
los gusanos tubícolas gigantes característicos de las comunidades que se asientan en
lo ventiladeros hidrotermales. Los investigadores determinaron que las dos nuevas especies
divergieron hace unos 42 millones de años, que es más o menos el tiempo que tardaron las
ballenas en evolucionar.
"Esto implica que estos gusanos vienen haciendo su trabajo sobre los huesos de las ballenas
hace bastante tiempo", dijo Bob Vrijenhoek, un biólogo evolucionista que fue uno de los
autores del artículo. "Esta no es una invención reciente".
Fábricas de esperma
Pero todavía quedan sorpresas. Los investigadores descubrieron tambien que mientras que
las hembras tienen unos cuantos centímetros de longitud, los machos son apenas unas hebras
microscópicas, que parecen servir nada más que como fábricas de esperma. Cuando ocurre la
fertilización, un gusano hembra puede recibir hasta 100 machos a la vez en su saco de
huevos.
Goffredi especula que el sexo que desarrolla una larva se determina cuando está flotando
en el agua, esperando encontrar donde aterrizar. Si la larva encuentra el hueso de ballena,
se convierte en una hembra. Pero si no hay un lugar donde caer y lo hace sobre una hembra,
entonces se convierte en un macho y provee de esperma a la hembra.
Más información:
Nature News