El nadador español David Meca se enfrentó a otro gran reto al intentar atravesar el lago Ness, en el que la fría temperatura del agua, entre 5 y 7 grados, fue su principal enemigo.

Meca pensaba nadar 36 kilómetros aproximadamente con una temperatura media del agua entre 7-8 grados, aunque a 30 centímetros de profundidad, y debido a la suspensión de partículas de turba, que impide la incidencia de los rayos de sol, la temperatura desciende a cinco grados.

Meca decía antes de su aventura: "Llevaré gafas oscuras para evitar la visibilidad dentro del agua. Si veo a Nessie, creo que incrementaré la brazada y conseguiré un tiempo excelente. Como ya he dicho, y aunque a la gente le sorprenda, temo a las criaturas acuáticas", declaró Meca.

El reto de atravesar el lago es un proyecto que el nadador tenía en mente desde hace dos años, cuando visitó la zona para evaluar las posibilidades. Es ahora en invierno cuando las condiciones son mejores, pues el nivel de las aguas permanece estabilizado.

Pero el nadador no pudo con este nuevo reto. Las bajas temperaturas lo abatieron cuando ya había recorrido 27 kilómetros de los 36 del total. Y el "huidizo" Nessie, como otras veces, tampoco se presentó, lo que quizás le hubiese dado energías al nadador para completar los kilómetros que le faltaban.