23/Feb/05

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Falleció el escritor cubano Guillermo Cabrera Infante

El scritor exiliado cubano y una de las plumas más originales de la literatura contemporánea en lengua española, además de duro crítico de Fidel Castro, falleció a los 75 años.

(El Nuevo Herald) El autor de Tres tristes tigres murió el lunes en un hospital de Londres a causa de una septicemia, dijo Carmen Pinilla, vocera de su agente literario, la editorial Balcells, en Barcelona. El escritor, que residía en Lodres desde 1966, sufrió varias dolencias en los últimos años, entre ellas diabetes e insuficiencias cardíacas y renales, dijo el martes Pinilla en una entrevista telefónica. Agregó que la esposa del escritor, la actriz Miriam Gómez, le acompañó en el momento de la defunción en el hospital Chelsea y Westminster, donde se encontraba ingresado desde la pasada semana.

Cabrera Infante fue hospitalizado por haberse fracturado una cadera al caerse en su domicilio londinense. Sufría también una neumonía.

Según Gómez, el escritor será incinerado en Londres "lo más rápido posible", y sus cenizas "serán guardadas hasta que pueda volver algún día a una Cuba libre".

Cabrera Infante fue elogiado por su utilización experimental del lenguaje en sus novelas, ensayos y críticas de cine, campo en el que sobresalió y al que siempre tuvo gran pasión, hasta el punto que su filmacoteca ocupaba casi tanto espacio como la colección de libros que tenía en su casa londinense.

En 1997 ganó el premio Miguel de Cervantes de Literatura, el de mayor prestigio en las letras hispanas.

"Quizá su mayor originalidad fue transformar la crítica de cine en un nuevo género literario", opinó entonces Mario Vargas Llosa, que sirvió en el jurado del Cervantes.

Cabrera Infante nació en Gibara, en la provincia cubana de Oriente, el 22 de abril de 1929, hijo de una pareja de militantes fundadores del Partido Comunista cubano. Tras la revolución castrista en 1959, Cabrera fue director del suplemento literario "Lunes de Revolución", una de las voces del nuevo régimen.

Sin embargo, cayó en desgracia tras oponerse a la decisión del gobierno revolucionario de prohibir un documental filmado por su hermano sobre la vida nocturna de La Habana. Castro le reprendió públicamente en un juicio y las autoridades comunistas le prohibieron publicar.

Con todo, en 1962 Cabrera Infante fue designado agregado cultural en Bruselas. Regresó a Cuba para el funeral de su madre en 1965, pero reconoció que no podía ya seguir viviendo en su isla natal. Vivió brevemente en Madrid y desde entonces, los temas del exilio y la alienación hacia el régimen de Castro permearon muchos de sus escritos.

"No regresé (a Cuba) desde que me fui en 1965 y no lo haré hasta que Fidel Castro deje el poder", afirmó el escritor en 1997. En 1991 publicó una colección de ensayos políticos en los que criticó duramente al régimen de Castro, bajó el título "Mea Cuba".

Al no conseguir la nacionalidad española, "huí, aunque no de España, sino de la policía política de (el general Francisco) Franco", según contó en una entrevista que otorgó a un medio de difusión español años después. Cabrera Infante acabó en Londres en 1966, donde se afincó definitivamente y adquirió la nacionalidad británica. Anticastrista a ultranza, el escritor fue reaccionario para algunos y un genuino liberal para muchos más. Aunque se consideraba un "reaccionario de izquierdas", rompió entonces con Castro y denunció su gobierno autoritario.

Tres tristes tigres, que obtuvo en 1967 el premio Biblioteca Breve, es un relato de la vida nocturna y bohemia habanera poco antes de que estallara la revolución. "Su éxito me sorprendió. Está escrita la mitad en cubano por lo que la mayoría de los lectores no la entenderán", dijo el autor a The Associated Press en una entrevista que otorgó tras ganar el premio Cervantes.

Entre sus novelas más destacadas están, además, La Habana para un Infante difunto (1979), Holly Smoke (1985), Delito por bailar chachachá (1995), Ella cantaba boleros (1995) y Mi música extremada (1996). También publicó varias colecciones de cuentos y el libro de críticas cinematográficas Un oficio del siglo XX.

Cabrera tenía dos hijas de su primera esposa, de quien se divorció en 1961.