14/Nov/05

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La Nación lanza dos importantes premios junto con Sudamericana y el auspicio de Zurich

Se trata de un premio de novela y uno de ensayo. Se entregan $ 60.000 a cada uno.

(La Nación) - Fiel a su firme compromiso en favor de la cultura, dentro de la cual la literatura y el pensamiento ocupan un espacio relevante, el diario La Nación de Buenos Aires lanza, junto con Editorial Sudamericana y el auspicio de Zurich, los premios de Novela y de Ensayo 2005-2006, dotados con $ 60.000 cada uno.

Se ratifica así la tradición de apostar por la excelencia de la producción literaria e intelectual. Ello estará marcado por jurados de trayectoria internacional en el ámbito de la cultura, como Carlos Fuentes, Tomás Eloy Martínez, Griselda Gambaro, Santiago Kovadloff, Natalio Botana y Guillermo Jaim Etcheverry, entre otros.

De ambos concursos podrán participar todos los escritores mayores de edad, cualquiera que sea su nacionalidad, que presenten sus originales inéditos en español y con seudónimo. Las obras ganadoras serán publicadas por Sudamericana en la Argentina y en España.

La vigencia de ambos géneros está reflejada por la riqueza de los trabajos recibidos y el prestigio de los ganadores del certamen realizado este año: el novelista chileno Carlos Franz y la ensayista argentina Ivonne Bordelois.

Los originales de las novelas que competirán por el nuevo premio se recibirán desde hoy, lunes 14 de noviembre, hasta el 1° de abril de 2006. El premio se conocerá el 1° de julio del año próximo. En tanto, los originales de los trabajos de ensayos se recibirán a partir desde el 1° de abril hasta el 1° de septiembre de 2006. Y el premio se fallará el 1° de diciembre de ese año.

El narrador que resulte ganador obtendrá, además de la suma de dinero y la publicación de la obra, un viaje a España por una semana, con fines promocionales. En tanto, la convocatoria de ensayo es la única apuesta por la excelencia en el pensamiento que existe en el país.

Los jurados que tendrán la responsabilidad de decidir la novela ganadora son el escritor mexicano Carlos Fuentes, el argentino Tomás Eloy Martínez, la dramaturga Griselda Gambaro, el editor de Sudamericana Luis Chitarroni y el editor del suplemento Cultura de La Nación, Hugo Beccacece. Habrá, también, un comité de preselección cuya misión será facilitar la misión del jurado.

En tanto, el jurado de ensayo estará integrado por el politicólogo Natalio Botana; el rector de la UBA, Guillermo Jaim Etcheverry; el filósofo Santiago Kovadloff; la editora de Sudamericana Paula Viale, y el periodista Bartolomé de Vedia.

La literatura, ante todo

La participación en un certamen literario abre siempre expectativas entre los escritores jóvenes o los aspirantes a serlo. Sobre todo, respecto de cuál es la perspectiva desde la cual prestigiosos jurados, como los que La Nación ha seleccionado para sus concursos de novela y ensayo, ponderan los trabajos inéditos que llegan a sus manos.

Consultado por este diario, el editor Luis Chitarroni subrayó que "lo más reconfortante y necesario en un certamen como el de La Nación-Sudamericana es hallar un autor que, aunque no haya encontrado todavía un estilo o una forma literaria, su original tenga relación con la narrativa argentina y mundial".

Chitarroni puso de relieve que "no es imprescindible que la obra sera originalísima ni que produzca una revolución en la literatura. Pero sí lo es que la escritura revele el amor que ese autor tiene por la narrativa". De modo tal que el galardón actúe como un incentivo para promover los altos valores literarios y ensayísticos de trabajos que, dadas las bases, pueden versar sobre cualquier idea o tema.

Los concursos a los que convoca La Nación reflejan en su larga historia un apego a la más larga tradición de la cultura argentina. Entre los jurados en las distintas etapas del premio de novela, por ejemplo, hubo legendarias figuras del olimpo literario, vigentes como sólo los clásicos consiguen serlo. Allí están Jorge Luis Borges, Eduardo Mallea, Adolfo Bioy Casares y Olga Orozco, entre otros nombres sobresalientes. Hubo, además, intelectuales sustanciales del escenario internacional, como Mario Vargas Llosa, Julián Marías, Julio María Sanguinetti y Octavio Paz, entre otros.

Fue en 1960 cuando tuvo lugar el primer concurso literario de La Nación, en el que resultó triunfador el español Fernando Quiñones Chozas por su serie de cuentos "Siete historias de toros y de hombres".

Entre otros ganadores posteriores, en los distintos géneros, se destacan Edgardo Cozarinsky, Ezequiel de Olaso, Alberto Manguel, Enrique Valiente Noailles y Gustavo García Saraví.

Las bases completas del concurso pueden ser consultadas en www.lanacion.com.ar.

Entre las novedades de la convocatoria de este año, tanto en novela como en ensayo, se encuentra la posibilidad de dejar desiertos ambos premios si los originales presentados no satisfacen los parámetros de calidad intelectual que ambos jurados exigen.

De darse esa circunstancia, la dotación económica del premio pasará al siguiente período, por lo que la convocatoria 2006-2007 contaría con un premio de $ 120.000 en el género que hubiera quedado desierto este año.

La opción de declarar desiertos ambos premios se vincula con una realidad extendida en distintos certámenes literarios y, recientemente en el Premio Planeta de España. La ausencia de tal cláusula impidió dejar desierta la edición del galardón catalán el mes último, cuando el presidente del jurado, Juan Marsé, puso de relieve la escasa calidad literaria de los trabajos presentados.

Por otra parte, no existe para los jurados de los concursos de novela y ensayo de La Nación-Sudamericana la obligación de seleccionar un número determinado de trabajos finalistas, pues la cifra dependerá de la calidad de los originales que resulten escogidos con vistas a definir, entre ellos, la novela o el ensayo ganador.

Dentro de la semana posterior al fallo de los jurados, en ambos certámenes, si hubiera finalistas, éstos podrán autorizar la apertura de los sobres que contienen sus datos personales, dado que es obligación presentar los originales con seudónimos. Si los finalistas no optaran por ello, los sobres serán destruidos.

La iniciativa dispuesta este año se vincula con la circunstancia de que numerosos escritores ya consagrados prefieren no presentarse en certámenes literarios ante la posibilidad de que se revelen sus nombres, pese a haber concursado con seudónimo. La garantía de las convocatorias de novela y ensayo de La Nación puede significar para los concursantes un estímulo para presentar sus originales.

En cuanto a éstos, Editorial Sudamericana se reservará el derecho de publicación ulterior de los trabajos presentados en caso de considerar apta su calidad literaria en las novelas o su propuesta, en el caso de los ensayos. Esa reserva será de dos meses.

Aportado por Alejandro Alonso