21/Feb/09

Revista Axxón Axxón en facebook Lectores de Axxón en facebook

Finaliza inusual seguidilla de bolas de fuego en América

Al parecer los inusitados fenómenos luminosos ya han terminado. Se reportaron al menos 6 avistamientos concentrados principalmente en Estados Unidos, Chile y Argentina.

Las lluvias de meteoros sobre la Tierra son muy usuales y más aún si cada mes del año está asociado a varias de estas. Por ejemplo en este mes de Febrero están en curso varias, entre ellas las Alfa Centáuridas, las Leónidas de Febrero y las Gamma Nórmidas. De hecho todos los días caen pequeñas rocas espaciales, pasando la mayoría de estas en forma desapercibida. Estas se generan en su mayoría por fragmentos de material (llamados 'meteoroides') que cometas dejan a su paso, y que se mueven con una órbita muy similar a la de sus progenitores. Cuando la Tierra cruza por estas estelas de material cometario, los meteoroides ingresan a la atmósfera y se consumen rápidamente, produciendo un fenómeno luminoso conocido como meteoro.

Generalmente los meteoros son asociados a fenómenos luminosos inofensivos, pero algunas pocas veces pueden ser muy llamativos por su extremo brillo, ruido intenso, o porque definitivamente son suficientemente masivos como para no consumirse por completo en la atmósfera, y llegar al suelo.

Los fenómenos más extremos en estos casos pueden ser dos: que el meteoroide llegue a la superficie terrestre (ahí pasaría a llamarse 'meteorito') o que, si bien la roca se consume antes de llegar, produzca un gigantesco incendio. Este último fenómeno deja una marca circular carbonizada, debido a que la entrada del meteoroide produce un extremo recalentamiento del aire que lo circunda durante su trayectoria, pero al consumirse completamente la roca, este 'cilindro' imaginario de aire hirviente sigue su camino, impactando el suelo y carbonizándolo.

Lo anterior es lo que exactamente ha pasado en la noche del 14 de Febrero de 2009, en el sur de Chile. Este fenómeno fue avistado entre la región del Maule y la de los Lagos. Más específicamente muy cerca del camino a El Huape - próximo a Chillán - según testigos, luego de verse una impresionante bola de fuego se escuchó un estruendo para luego comenzar un 'incendio circular'. Dada la particular forma del terreno carbonizado, ha dado pie a diversos medios de comunicación (periodísticos, o 'profesionales' si se quiere) a indicar que fue un OVNI (entiéndase en el sentido de 'platillo volador') el que generó el incendio, dado el deplorable conocimiento científico de quienes se encargan de comunicar este tipo de noticias.

Como ya se ha explicado con una fundamentación clara y sólida en una noticia anterior, claramente este fenómeno en particular fue lo que es técnicamente llamado 'bola de fuego', y el meteoroide que lo originó debió tener una masa tal que le permitió a su onda de choque de aire calcinante proseguir inalterada hasta el suelo, para luego carbonizarlo.

Pero este no fue el único avistamiento. Ya el día 13 de Febrero había sido reportado en Texas otro avistamiento similar, y luego otro en el mismo estado el 15 del mismo mes. Sorprendentemente en la ciudad argentina de Neuquén, según informó el medio escrito Río Negro on line, también se avistaron fenómenos similares el mismo 14 de Febrero en la noche, pero en esa ocasión fueron tres meteoros y se vieron un poco más temprano que con respecto al visto en Chile. Evidentemente los avistamientos de Chile, Argentina y Texas deberían estar conectados entre sí dada la extrema cercanía temporal de los sucesos.

Algunas veces los cometas sufren de fragmentaciones espontáneas que pueden hacerle perder desde pequeñas piezas de roca hasta un rompimiento generalizado que le hace perder su identidad como cometa. Muy probablemente, estos meteoroides inusualmente masivos fueron generados por el mismo cuerpo cometario, y quedaron orbitando en torno al Sol, hasta que la Tierra y estos se encontraron, para finalmente generar estos inusitados y fenomenales eventos astronómicos. Existen muy pocas probabilidades de que sucesos como estos ocurran, pero aún así la posibilidad existe.

A partir del 15 de Febrero ya no se han reportado más avistamientos inusuales de meteoritos, por lo que posiblemente este enjambre de bolas de fuego que afectó a América del Norte y del Sur ya ha terminado. En todos los casos no se reportaron víctimas ni daños personales.

Fuente: Redastro. Aportado por Gustavo A. Courault