Encuentran misterioso monumento bajo el mar de Galilea

Los investigadores de la Universidad de Tel Aviv dicen que la singular estructura es producto de expertos en construcción

A las orillas del Mar de Galilea, que se encuentra en el norte de Israel, existen una serie de sitios arqueológicos importantes. Ahora los investigadores de la Universidad de Tel Aviv (UTA) han descubierto una antigua estructura muy por debajo de las olas, también.

Los investigadores se toparon con un monumento en forma de cono, de unos 230 metros de diámetro y 39 metros de altura y un peso estimado de 60.000 toneladas, mientras llevaban a cabo un estudio geofísico en el sur del Mar de Galilea, informa el profesor Shmulik Marco del Departamento de Ciencias Geofísicas y Planetarias de la UTA. El equipo también incluyó a los profesores de TAU Zvi Ben-Avraham y Moshé Reshef y los alumnos de TAU Gideon Tibor del Instituto de Investigación Oceanográfica.

Los resultados iniciales indican que esta estructura fue construida en tierra firme hace aproximadamente 6.000 años, y luego sumergida bajo el agua. El Prof. Marco la ha llamado una hazaña impresionante, teniendo en cuenta que es probable que las piedras que componen la estructura fueron traídas de más de un kilómetros y medio de distancia y dispuestas de acuerdo con un plan de construcción específico.

El Dr. Yitzhak Paz de la Autoridad de Antigüedades y de la Universidad Ben-Gurion dijo que el sitio, que fue detallado recientemente en la revista International Journal of Nautical Archaeology, se asemeja a los primeros lugares de enterramiento en Europa y que probablemente fue construido a principios de la Edad de Bronce. Él cree que puede haber una conexión con la antigua ciudad de Beit Yerah, cercana a ese lugar de la costa, que fue la ciudad más grande y fortificada en el área.

Antigua estructura revelada por el sonar

El equipo de investigadores inicialmente se propuso descubrir el origen de los guijarros de aluvión que se encuentran en esta zona del Mar de Galilea, que creen que fueron depositados por el antiguo riachuelo Yavniel, un precursor del río Jordán al sur del Mar de Galilea. Cuando utilizaban la tecnología de sonar para examinar el fondo del lago, se observó una enorme pila de piedras en medio de la cuenca, que en general es liso.

Curioso al encontrar el inusual eco en su sonar, el Prof. Marco fue a bucear para saber más. Una mirada más cercana reveló que la pila no era una acumulación azarosa de piedras, sino una estructura compuesta con un propósito, construida de piedras volcánicas de un metro de largo llamadas basalto. Debido a que el depósito más cercano de esta piedra está a más de un kilómetro y medio de distancia, él cree que estos trozos fueron llevados al sitio específicamente para esta estructura.

Para estimar la edad de la estructura, los investigadores recurrieron a la acumulación de arena alrededor de su base. Debido a la acumulación natural de arena a lo largo de los años, la base ahora está de seis a diez metros por debajo del fondo del mar de Galilea. Teniendo en cuenta la altura de la arena y la tasa de acumulación, los investigadores dedujeron que el monumento tiene varios miles de años de edad.

Mirando más en profundidad

A continuación, los investigadores planean organizar un equipo especializado en excavaciones subacuáticas para aprender más acerca de los orígenes de la estructura, incluyendo la investigación de la superficie donde fue construida la estructura. Una búsqueda de artefactos ayudará a fechar con más precisión el monumento y a dar pistas sobre su propósito y sus constructores. Y si bien es seguro que interesará a los arqueólogos, el Prof. Marco dice que los hallazgos también podrían aclarar la historia geológica de la región.

«La base de la estructura —que estuvo alguna vez en tierra firme— es inferior a cualquier nivel de agua que conocemos en el antiguo Mar de Galilea. Pero esto no significa necesariamente que los niveles de agua hayan ido en aumento», dice. Debido a que el Mar de Galilea es una región tectónicamente activa, el fondo del lago, y por lo tanto la estructura, pueden haber cambiado con el tiempo. Se planea una investigación adicional para acrecentar la comprensión de los movimientos tectónicos en el pasado, la acumulación de sedimentos y la evolución de los niveles de agua en toda la historia.

Fuente: Tel Aviv University. Aportado por Eduardo J. Carletti

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