Se prevé que luna marciana formará anillo alrededor del planeta rojo

Es probable que Fobos se desgarre para formar un sistema de anillos… como puede haber ocurrido con otras lunas

Algún día, Marte podría tener anillos como Saturno. La luna marciana Fobos, que se acerca en espiral inexorablemente hacia el planeta rojo, se desintegrará para formar un sistema de anillos dentro de alrededor de 20 a 40 millones de años a partir de ahora, según cálculos publicados el 23 de noviembre. Otras investigaciones sugieren que los largos surcos en la superficie de Fobos pueden representar las primeras etapas de esa inevitable ruptura.

Fobos podría no estar sola en esa desgracia. Los investigadores han especulado que la luna de Neptuno Tritón también podría estar cayendo hasta hacerse pedazos. Y otras lunas, ahora desaparecidas en otros lugares del Sistema Solar, pueden haber sufrido un destino similar en un pasado distante, migrando hacia su planeta y siendo trituradas en un sistema de anillos antes de desaparecer. Los icónicos anillos de Saturno pueden haberse formado de esta manera, también.

La muerte de una luna

La observación de Fobos en las primeras etapas de su agonía es una rara oportunidad para los científicos de presenciar un proceso que podría haber sido algo generalizado en los inicios del Sistema Solar, dice Benjamin Black, un científico planetario de la Universidad de California, Berkeley. Él y Tushar Mittal, su colega de Berkeley, publicaron el artículo sobre el sistema de anillos el 23 de noviembre en la revista Nature Geoscience.

En casi todos los sentidos, Fobos es un lugar extraño. Es pequeña, mide 22 kilómetros de diámetro, y está cerca de su planeta: a sólo 6.000 kilometros por encima de la superficie. Cada año, la gravedad de Marte desplaza a Fobos varios centímetros más cerca, y los científicos saben hace mucho tiempo que la Luna o bien caerá intacta en picada hacia su muerte, o se triturará en un sistema de anillos antes de desaparecer.

Para predecir cómo podría producirse la muerte de Fobos, Black y Mittal tomaron datos como la densidad y la dureza de Fobos, y los compararon con un modelo utilizado para estimar la fuerza de las rocas. Calcularon que las partes más débiles de Fobos empezarían a extenderse y formar un anillo en unos 20 millones de años a partir de ahora.

La ruptura en sí ocurriría rápidamente, quizá sólo en unos días o semanas. «Si estuviera de pie en la superficie de Marte, podría tomar una silla de jardín y ver a Fobos deshacerse y desparramarse en un gran círculo», dice Black. Debido a que las partículas más pequeñas pueden permanecer en el aire más tiempo que los más grandes, el anillo duraría alrededor de 1 millón a 100 millones de años antes de que finalmente descendiera a la superficie, calcularon él y Mittal.

Rompiéndose

Un segundo estudio, aún sin publicar, explora cómo la atracción gravitacional de Marte ya está produciendo estrés en Fobos. Las ranuras de kilómetros que marcan cicatrices en la luna son estrías que reflejan la orientación de las fuerzas de marea que están estirando Fobos para hacerlo pedazos. Los investigadores llegaron a esta conclusión después de analizar las marcas. «Las ranuras en la superficie son probablemente los primeros signos de las fuerzas de marea», dice Terry Hurford, un científico planetario del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland. Él presentó el trabajo este mes en una conferencia de ciencia planetaria en National Harbor, Maryland. (Deimos, otra luna de Marte, está demasiado lejos del planeta como para ser sometida a las mismas tensiones, por lo que no se va a romper en cualquier momento cercano).

 

 

Una nave espacial futura de Fobos podría medir su dureza interna y aportar una visión más clara sobre exactamente cómo y cuándo se va a romper, dice Black. Una sonda rusa que iba a explorar Fobos cayó a la Tierra en 2012, meses después de un fallo de lanzamiento que la dejó en órbita terrestre en lugar de en su camino a Marte.

Fobos y Deimos podrían ser los últimos de posibles cientos de pequeños objetos que giraron en espiral alrededor del planeta durante tiempo, dice Erik Asphaug, científico planetario de la Universidad Estatal de Arizona en Tempe. Eso significa que la superficie de Marte podría estar marcada por cráteres formados en sus últimos momentos.

Mittal dice que él y Black buscarán signos de estas lunas ya muertas.

Nature doi: 10.1038/nature.2015.18852

Fuente: Nature. Aportado por Eduardo J. Carletti

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