24/Ene/04

Alacranes e insectos proliferan y afectan a la gente en centro y norte de Argentina

TEMAS: Biología, Zoología, Entomología, Insectos, Arácnidos, Escorpiones, Alacranes, Tityus trivittatus

Además de los insectos vectores de enfermedades tan graves como el dengue y el mal de Chagas, también proliferan este año en Argentina los alacranes (o escorpiones), invadiendo zonas pobladas. Las primeras señales de alarma provinieron de la capital de La Rioja, provincia del noroeste argentino, y pronto se le sumaron otras localidades de la misma provincia. Ahora se suman Corrientes y Santa Fe, ubicadas en el este y no tan al norte. Los alacranes que invaden estas ciudades no son para ignorar, se trata de especies como el Tityus trivittatus, cuya picadura aplica venenos altamente tóxicos capaces de matar personas.

Los entomólogos explican que cuando la gente ve estos arácnidos, es porque hay muchos. El escorpión convive con la gente desde hace muchísimos años. Y sus poblaciones se presentam en toda la Argentina. Son artrópodos emparentados con las arañas. Se los encuentra desde el Altiplano, a 4000 metros de altura, hasta la Patagonia (aunque en mucho menor cantidad y mayormente fuera de las ciudades). Hay especies más chicas y otras grandes.

Su aproximación a las ciudades se debe a que se alimenta de insectos y las ciudades pueden aportar buenas cantidades. Convive, por ejemplo, con las cucarachas. Las cloacas son lugares húmedos donde se dan altas temperaturas. Los alacranes son predadores: comen a estas cucarachas y otros insectos. Sus aspectos "van de un color amarillito a café claro y puede medir hasta 18 centímetros y el veneno es aplicado con el extremo de la cola al picar".

La picadura de estos arácnidos no es directamente mortal, a diferencia del de la viuda negra, una pequeña araña cuyo veneno es muy virulento. Los ataques de los alacranes la mayoría de las veces producen intenso dolor, descomposturas, pérdida momentánea de la visión y el equilibrio. En personas débiles, ancianos y niños, o por reacciones alérgicas, puede provocar la muerte, pero no es en la generalidad de los casos.

Un veterinario de Corrientes explica: "La peligrosidad depende del paciente, según la edad, el estado físico y si son alérgicos". Entre los síntomas a resaltar se encuentran "un ardor importante y en algún instante dolor en las articulaciones como una especie de anestesia. Lo digo porque a mí me picó varias veces y estoy acá, vivo".

Lo importante es la prevención. "Son plagas urbanas, conviven en nuestras casas y es responsabilidad de cada persona mantener la higiene. Por lo tanto hay que fumigar periódicamente en forma apropiada y acá en Corrientes, por las características climatológicas que tenemos, lo apropiado sería hacerlo cada dos meses".

Si una persona fue picada debe recurrir a un centro asistencial de salud. Se debe tomar agua y desinfectar la zona afectada. Y aclaró que los alacranes "huyen del ser humano, tienen hábitos nocturnos y salen a hacer su comida de noche". Generalmente pican cuando inadvertidamente pisamos cerca de ellos o ponemos la mano bajo la cama buscando algo. "Se los aprieta y es un mecanismo de defensa, no es habitual que agredan al ser humano".

En este marco cabe resaltar que, si se los encuentra en las viviendas, la responsabilidad es de sus moradores, pero en los espacios públicos se deben hacer cargo los Municipios. Estos artrópodos provienen en mayor medida de las cloacas y desagües que deberían ser fumigados a través del área de saneamiento ambiental.

Desde viejas épocas se sabe de la existencia de escorpiones en Uruguay, Paraguay Brasil y Argentina. En nuestro país, el género Tityus cuenta con alrededor de 90 especies descriptas, con su hábitat natural en Santa Fe, Chaco y Santiago del Estero, pero también se lo ha encontrado en Entre Ríos, Córdoba, Tucumán y norte de la provincia de Buenos Aires. Su presencia en estas ciudades probablemente se deba a que haya sido llevado desde su hábitat natural por medio de transportes terrestres y pluviales hasta diferentes terminales ferroviarias y puertos de desembarco.