Página Noticias de Axxón
[Noticias de Axxón ] [ Página principal ] [ Zapping ]

21/jun/02

Científicos australianos lo consiguieron con el timo, un órgano clave en el sistema inmunológico que puede verse afectado por el envejecimiento, el ataque de virus como el del sida, la quimioterapia o anomalías genéticas. Podría ser reemplazado a largo plazo.




Revista Axxón

Axxón en
facebook


Lectores de Axxón en facebook



Logran crear por primera vez una glándula a partir de células madre

(Clarín) Científicos de la Universidad Monash de Australia identificaron por primera vez células madre que forman parte del sistema inmunitario y las usaron para hacer crecer una glándula vital, aunque con muy poca prensa: el timo. Por ahora, sólo produjeron esta glándula para ratones.

En el cuerpo humano, el timo se encuentra en la entrada del tórax, adelante del corazón, por abajo de la terminación del cuello. Durante la infancia, este órgano sufre un proceso de regresión hasta quedar convertido en islotes de tejido disperso. Su función es importantísima: interviene en la producción de los linfocitos T, que pueden destruir otras células y las bacterias.

Según demostró el equipo de Jason Gill y Richard Boyd, de la Facultad de Medicina de la universidad australiana, en Melbourne, el timo que funcione mal podría llegar a ser reemplazado a largo plazo.

Esta glándula puede verse afectada por el envejecimiento, el ataque de virus como el del sida, la quimioterapia o ciertas anomalías genéticas. Cuando se altera su funcionamiento, el organismo se vuelve más susceptible a la infección.

La investigación —que se publica en el último número de la revista especializada Nature Immunology (immunol.nature.com)— consiguió primero identificar una pequeña población de células que son capaces de generar un timo funcional.

Hasta ahora, "una de las grandes cuestiones de la inmunología había sido cómo construir un timo", comentó el profesor Boyd, al rebobinar el pasado de su estudio.

El timo está formado por dos partes principales: los linfocitos y el epitelio. Cada una tiene asignada una misión. "En los últimos treinta años se supo más sobre células madre hemopoiéticas que llevan a los linfocitos, pero hasta el momento no conocíamos mucho sobre qué células intervienen en la creación del epitelio del timo", afirmó Boyd.

Había que encontrar, entonces, las células que dan origen al epitelio del timo. Esto es, había que hallar la parte que controla la capacidad de los linfocitos T para detectar invasores foráneos y que los detiene para que no ataquen a los tejidos del propio organismo. Después de 15 años de trabajo, Boyd y Gill —con sus colaboradores— lo lograron: "El descubrimiento de las células madre epiteliales del timo es enormemente excitante para nosotros y nos ha llevado muchos años de dedicación". Pero la investigación no se detuvo allí.

Los científicos pusieron a prueba estas prometedoras células: las trasplantaron sobre las membranas que cubren los riñones de los ratones. Para seguir el rumbo de las células en cuestión, usaron cierta proteína como marcador. Y como herramientas, los australianos utilizaron las técnicas de fluorescencia y la de los anticuerpos monoclonales, que fue desarrollada por el argentino César Milstein, junto con otros especialistas.

Al final, la pequeña población de células madre sí dieron lugar al timo, que se fue generando sobre los riñones de los ratones. Esto sucedió a las ocho semanas del trasplante celular.

Aunque ése no es el lugar donde normalmente se encuentra en los ratones, el timo nuevo funcionó como se esperaba. Así, a pesar de que falta tiempo para disponer de una glándula similar para usar en humanos, generaron expectativas.

"Este trabajo explica por primera vez un detalle molecular: cómo se forma el timo a partir de células precursoras", comentó el investigador en inmunología del Instituto Leloir/Fundación Campomar, Fernando Goldbaum. Para este científico, los resultados de los australianos son valiosos si se considera que "el timo es un órgano vital para el funcionamiento del sistema inmune, encargado de defendernos de los microorganismos". Goldbaum prefiere ilustrar cuál es la función central del timo: "educa" a los linfocitos T para que aprendan a distinguir tejidos y moléculas propios de los ajenos, y no generen autoinmunidad (un fenómeno llamado tolerancia).

"Utilizando un anticuerpo monoclonal, los autores australianos describen una proteína que les permite demostrar cómo se origina el timo a partir de las células epiteliales progenitoras", señaló el investigador Goldbaum.

Enseguida agregó: "Esto es un avance importante, que sienta las bases para el desarrollo de terapias en enfermedades por inmunodeficiencia, como por ejemplo el Síndrome de DiGeorge, en los casos en que el timo está ausente. También, este estudio podría usar en terapias génicas para evitar el rechazo de trasplantes".

Boyd, uno de los del grupo australiano, piensa que faltarían entre dos y cinco años para llevar el experimento a humanos. Pero igual recalcó su propio mérito: "Fue la primera vez que se generó una glándula totalmente funcional partiendo sólo de células madre".


            

Noticias anteriores, por tema
Ciencia Cine Espacio Espectáculos Historietas Internet Juegos Libros Literatura Revistas Sociedad Tecnología Televisión

Noticias anteriores, por año
2017  2016  2015  2014  2013  2012  2011  2010  2009  2008  2007  2006  2005  2004  2003  2002