20/Jul/04
|
Revista Axxón
Axxón en facebook
Lectores de Axxón en facebook
|
|
El plancton es capaz de regular el clima a su beneficio
No queda duda de que los organismos del fitoplancton (la parte vegetal del plancton) son
muy pequeños, lo que se dice insignificantes, pero eso no significa que no puedan hacer
grandes cosas, como cambiar el clima para que se adecue a sus necesidades.
Una investigación reciente financiada por el Departamento de Ciencias de la Tierra de la
NASA ha demostrado que, cuando los rayos ultravioleta que irradia el sol sumamente
dañinos para la vida están muy fuertes, las diminutas plantas marinas liberan grandes cantidades
de compuestos que forman nubes. Los compuestos se evaporan al aire a través de una serie
de procesos químicos que dan como resultado nubes muy reflectantes. Esas nubes, a su vez,
impiden que la radiación moleste al fitoplancton.
Los hallazgos no sólo confirman teorías anteriores de que el plancton está vinculado con
la formación de nubes sobre el océano sino que también permite obtener una mejor comprensión
de la manera en que los seres vivos afectan el clima de la Tierra.
"El mensaje que nos queda es que todos los procesos que se desarrollan en el océano y los
que se relacionan con el clima se encuentran muy estrechamente vinculados", dijo David
Siegel, que participó en la investigación y es director del Instituto de Ciencias
Computacionales de la Tierra de Santa Barbara, California. "Es un incentivo para que otros
investigadores indaguen las formas en que interactúan la biología y el clima".
Siegel y el investigador del Instituto Oceanográfico Woods Hole Dierdre Toole anunciaron
los resultados de su investigación en la revista científica Geophysical Research Letters.
Los dos investigadores llevaron a cabo el estudio empleando mediciones tomadas frente a
la costa de Bermuda. Allí, encontraron que los niveles oceánicos de un compuesto denominado
dimetilsulfoniopropionato (DMSP) se encontraban directamente relacionados con el nivel de
radiación ultravioleta que le llega al fitoplancton que vive cerca de la superficie del
océano.
El DMSP es un importante vínculo dentro del ciclo plancton-nubes, puesto que cuando abandona
las células de fitoplancton e ingresa al agua, las bacterias lo descomponen en una sustancia
química llamada dimetil sulfuro o DMS. El agua que se evapora, a su vez, lleva el DMS al
aire, donde la substancia reacciona con el oxígeno para formar varios compuestos de azufre.
Esos compuestos se reúnen como partículas de polvo que estimulan la condensación del agua
que, por último, lleva a la formación de nubes.
El proceso completo tiene lugar muy rápidamente, para garantizar que el plancton no quede
expuesto a los rayos del sol por demasiado tiempo. En su investigación, Siegel y Toole
encontraron que la capa superior de DMS en la atmósfera podía ser reemplazada en unos pocos
días.
El solo hecho de que el proceso exista puede ser una señal de que la Tierra está mejor
preparada para hacer frente a fuerzas climáticas como la reducción de la capa de ozono
que también bloquea los rayos ultravioleta que lo que hasta ahora se creyó.
No obstante, Siegel cree que es demasiado pronto para llegar a una conclusión de ese tipo
porque no está claro qué difusión tiene el fenómeno. Tampoco se sabe a ciencia cierta
qué cantidad de luz ultravioleta y qué otras fuerzas puede tolerar el sistema.
Los investigadores ahora planean crear modelos computacionales para explorar la medida en
que la presencia y la ausencia del fitoplancton podría implicar la modificación del clima.
También esperan poder ampliar su estudio utilizando información de la misión Sea-viewing
Wide Field-of-view Sensor (Sensor de Campo de Visión Amplio para Monitoreo Marítimo) de
la NASA, que reúne datos sobre los cambios experimentados por la luz visible que llega
a la superficie del océano.
Es posible que el trabajo ampliado demuestre que el fitoplancton afecta el clima en una
escala global, señaló Siegel.
Si así fuera, también es posible que los científicos a quienes les gusta hablar del
"efecto mariposa" la teoría de que el aleteo de las alas de una mariposa en una parte
del mundo podría llevar con el tiempo a patrones climáticos violentos en otras partes
descubran en poco tiempo más que está más de moda hablar del "efecto fitoplancton".
Más información:
Wired