29/Jul/04
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Hispanos siguen sin lograr igualdad en cómic y ciencia ficción
Pese a que en los últimos años ha aumentado la representación de hispanos en cómic y ciencia ficción, existe todavía una amplia brecha para equiparar sus
logros con los de los afroamericanos en el combate a la desigualdad de representaciones raciales, de acuerdo con participantes en la convención internacional
Comic-Con que se realiza en la ciudad de San Diego.
(Primera Hora) En el panel "Mucho más allá de los pequeños hombrecitos verdes: personas de color en la ficción especulativa", escritores en los géneros
de ciencia ficción y el cómic discutieron las transformaciones en los géneros de los últimos años. El consenso entre los panelistas, todos ellos afroamericanos, es
que mientras se han presentado avances en el género, es deseable que hispanos y asiáticoamericanos logren una mayor presencia en la industria.
La coordinadora del panel, Betsy Mitchell, editora anglo de Libros Del Rey, división de ciencia ficción de la editorial Randomhouse, dijo a EFE que la ausencia
de escritores latinos en la discusión se debe a que aún son minoría y difíciles de localizar. "Otro panel con hispanos podría ser organizado pero por el momento
(ellos) no están presentes en las discusiones de la industria", indicó Mitchell.
La escritora Pam Noles reconoció que ahora tanto minorías asiáticoamericanas como mexicanas, la primera en el caso de la excesiva sexualización de las
mujeres y la segunda en el caso del enfoque en la criminalidad, se enfrentan a retos similares a los que escritores afroamericanos han respondido y siguen
enfrentando. "En la industria existe sutileza para definir a los 50 millones de personajes blancos, pero ésta desaparece con todos los demás. Necesitamos tanto
que los creadores mexicanos o asiáticos luchen para ser incluidos en el mercado como que la industria remueva los obstáculos que los excluyen", dijo Noles a
la agencia EFE.
Por su parte Steven Barnes, autor del libro Star Wars: The Cestus Deception, consideró que para miembros de minorías consumir los géneros de ciencia
ficción y cómic ha representa una función análoga al de los programas de computadoras que permiten instalar programas Microsoft en la plataforma Macintosh.
"Hay una función de traducción, marcada por una disociación emocional, que permite seguir operando en el contexto de una cultura ajena en la que no hay casi
gente que se parezca a nosotros, a menos que sea representada negativamente", dijo Barnes.
La autora del libro The Living Blood, Tananarive Due, destacó que la riqueza de los cómics y la ciencia ficción se debe a que en ellos "lo imposible es
posible y se puede mejorar al mundo", por lo que a través de sus personajes miembros de minorías pueden lograr identificación que les permita sobrevivir en
tiempos difíciles.
Para escritores miembros de minorías, consideró Barnes, el reto es mostrar el problema racial de forma tal que se evite convertirlo en una realidad esencial y en
una forma que no sea didáctica, atendiendo a la vez a las necesidades de los diferentes grupos de consumidores, divididos en los Estados Unidos entre la
población blanca y el resto.
Mientras Minister Faust, autor de Coyote Kings of the Space-Age Bachelor Pad notó que incluso ahora es un tema tabú en la pantalla grande el ver a un
afroamericano teniendo relaciones sexuales, lo que sigue remarcando el miedo de la alteración de los patrones raciales en esta sociedad. Noles hizo un llamado
para que guionistas y autores "dejen vivir a los héroes de color" en sus historias, notando que al final de las tragedias los sobrevivientes suelen ser blanco, al
grado tal que entre afroamericanos, cuando uno de ellos no había visto la última cinta de esos géneros, la pregunta obligada suele ser "y ahora, ¿cómo mataron
al hermano (brother)?"
Este año marca el 35 aniversario de la convención, con una presencia estimada de 75.000 personas, lo que la convierte en uno de los mayores eventos
relacionados con la cultura popular en el país.