20/Sep/04
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El otro meteorito marciano
El que es quizás el más famoso de los meteoritos marcianos fue descubierto
en Allen Hills, en la Antártida, y generó una controversia acerca de
registros fósiles y sobre si alguna vez Marte tuvo condiciones más
favorables que las actuales. Ahora pasa a ser vedette otro trozo de roca.
"La mayoría de los meteoritos marcianos que se estudian en laboratorios
terrestres", dice el Dr. William Hartmann, científico, pintor y escritor
actualmente trabajando con el equipo a cargo de las imágenes del Mars Global
Surveyor, "muestran claras evidencias de haber sido expuestos a humedad y
agua salada".
"Uno de ellos, llamado Lafayette, tiene suficientes minerales erosionados como
para poder haber sido datado por dos laboratorios. Se encontró que la
exposición al agua ocurrió hace 670 millones de años".
El meteorito Lafayette toma su nombre de Lafayette, Indiana (EE.UU.) lugar
donde, en 1935, fue identificado en una colección geológica.
Tiene una masa de 800 g y su forma es la de un cono truncado, de entre
cuatro a cinco centímetros de ancho. La forma cónica de la roca es
consistente con el derretimiento y posterior solidificación que sufrió al
ingresar en la atmósfera terrestre.
Parte de su superficie se deformó hasta formar una suave costra veteada. A
primera vista es posible confundir el meteorito con el sombrero de un hongo.
El Lafayette es el meteorito marciano que contiene la mayor proporción de
agua (0,387 %). En 1992 se determinó que el agua era de origen
extraterrestre.
Lo que es más interesante, la composición de la roca fue enriquecida en
agua pesada, o deuterio, como se pudo medir al ser calentada
escalonadamente. Luego de formarse como una roca volcánica rica en hierro,
el Lafayette fue aparentemente alterado por el agua.
Se encontró que el mineral olivina, que generalmente no permanece mucho
tiempo sin cambiar en la presencia de agua, era el más alterado de todos los
minerales ferrosos de la muestra.
Al ser examinado en secciones finas, el meteoro dejó ver granos rojos de
herrumbre rodeados de vetas negras, lo que a veces se denomina una
estructura fibrosa.
Este carácter volcánico ya había cambiado notablemente mientras el Lafayette
aún estaba en Marte, donde, se pensaba, no era probable que los cambios se
debieran al agua.
La conclusión de los mineralogistas fue sorprendente y definitiva: hace
millones de años el Lafayette reposaba en agua salada.
Aproximadamente una parte en 300 permaneció encerrada como agua dentro del
meteoro.
Se cree que hace 700 millones de años, en Marte, el agua salada comenzó a
filtrarse en el Lafayette y a cambiar el contenido mineral de la roca.
Hace unos 11 millones de años el fragmento salió despedido de Marte y vino a
caer sobre la Tierra, aproximadamente 2.900 años atrás. O, para decirlo de
otro modo, el Lafayette llegó a la Tierra hace relativamente poco tiempo,
apenas después de que los egipcios completaran las pirámides.
En el 2000 los científicos llegaron a la conclusión de que las "sales"
identificadas en la alteración del Lafayette (basadas principalmente en el
mineral iddingsita) se formaron por evaporación de salmuera ácida, en Marte.
Combinando estos datos con la reciente evidencia de que el terreno que hoy
recorre el vehículo Opportunity estuvo en el pasado 'empapado' de agua
salada rica en azufre, los descubrimientos del Lafayette, que carecían de un
contexto que permitiera incluirlos en la historia geológica de Marte,
comienzan a encajar.
Para contestar estas preguntas contextuales se necesitará cotejar las
colecciones de meteoritos con los resultados de los análisis químicos que
este año están realizando los vehículos en Marte.
Si el meteorito de Allen Hills es el más antiguo, y el de Lafayette el más
húmedo, entonces, en este notable tráfico de meteoros entre el planeta rojo
y la Tierra, nuestro planeta vecino parece habernos dejado algunas
intrigantes pistas sobre su historia geológica.
Seleccionado y traducido por Carlos, equipo Axxón
Más datos: Space Daily