15/Feb/05!f>
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Investigadores argentinos hallan piel de embrión de dinosaurio
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Los huevos, de entre 12 y 15 centímetros de diámetro, se encuentran agrupados en nidos excavados en el sustrato y fueron hallados en el yacimiento patagónico
de Auca Mahueo
Un equipo de investigadores, encabezado por los argentinos Luis Chiappe y Rodolfo Coria, han encontrado por primera vez piel de embrión de dinosaurio en el
yacimiento patagónico de Auca Mahuevo, que, según han explicado en Barcelona, conserva intacta "toda la textura y propiedades a excepción del color".
Chiappe y Coria, que participan en Barcelona en las jornadas 'Los dinosaurios en el siglo XXI', organizadas por el museo de la ciencia CosmoCaixa, fueron los
descubridores en 1995 del Giganotosaurus, un dinosaurio carnívoro de más de doce metros, con cráneos de dos metros de largo.
Coria ha comentado que el Giganotosaurus "vivió hace 100 millones de años en diversas partes del mundo y fue la primera manifestación de gigantismo en la
evolución de los dinosaurios carnívoros".
Al final del Cretácico, añade Coria, "este tipo de gigantismo se reeditó en lo que hoy ocupa Norteamérica y Asia con el Tyrannosaurus rex y sus parientes".
El mismo equipo de Chiappe y Coria es el responsable del hallazgo del único yacimiento de huevos de dinosaurio con embriones en su interior. Los huevos, de
entre 12 y 15 centímetros de diámetro, se encuentran agrupados en nidos excavados en el sustrato, en los que se pueden localizar una media de entre 15 y 35
unidades. Dichos nidos fueron excavados en el sustrato, en forma de oquedades de diámetros variables de entre 1 y 2 metros.
Ovíparos y sedentarios
Según Coria, "la excavación de estos huevos con embriones nos ha permitido saber que estos saurópodos dinosaurios herbívoros cuadrúpedos, muy pesados,
con colas y cuellos muy largos y cabezas pequeñas eran ovíparos".
De la localización de huevos con embriones en diferentes sustratos se difiere además que "esta especie de dinosaurio se congregaba en un lugar de nidificación y
mantenía una fidelidad al mismo lugar en generaciones, como sucede hoy con tortugas o muchas aves".
Auca Mahuevo, en la provincia argentina de Neuquén, es, asegura Coria, "el único lugar del mundo en el que se puede describir el esqueleto de un embrión de
dinosaurio y su piel".
Entusiasmado, Coria explica que "tenemos la piel de un centenar de individuos, que es como una reproducción tridimensional, con su textura y los diferentes
accidentes".
Similitudes con el monstruo de Gila y el camaleón
Cotejándolos con los pocos restos de piel de dinosaurios adulto que se conservan en el mundo, "podemos decir que siguen un patrón muy parecido a los
dinosaurios de más edad, y que en comparación con los reptiles actuales tienen similitudes con la piel del monstruo de Gila único lagarto venenoso y la del
camaleón".
La piel de estos embriones no presenta escamas imbricadas o en forma de teja, sino que se trata de "escamas en pavimento, sin estar superpuestas".
Otra de las singularidades de Auca Mahuevo es, apunta Coria, la aparición de muchos huevos patológicos, que "corresponden a períodos de estrés que afecta a
la población y que, como sucede en la actualidad con las aves, provoca la reabsorción del huevo antes de ser puesto".
En el yacimiento, los investigadores argentinos han encontrado recientemente un grupo de dinosaurios carnívoros de gran tamaño, emparentados con el
Giganotosaurus y que vivieron en la misma época que el Argentinosaurus, el mayor dinosaurio herbívoro conocido, con 40 metros de longitud y 100 toneladas de
peso.
Para Coria, "el hallazgo en el mismo lugar de nueve individuos de este tipo de dinosaurio enorme nos ha llevado a pensar que no eran altamente competitivos en
el territorio y que, sin poder hablar de manadas o de coordinación, sí podrían presentar algún tipo de cooperación circunstancial para atacar a sus presas, una
conducta que se observa en la actualidad en los dragones de Comodo".
Fuente: EFE
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