23/Mar/05

Revista Axxón Axxón en facebook Lectores de Axxón en facebook

¿Agujeros negros en Nueva York?

Los míticos y fascinantes agujeros negros podrían ser reproducidos en las cuatro paredes de un laboratorio, si las teoría del científico estadounidense Horatiu Nastase son ciertas. Una posibilidad que recuerda el argumento de Tierra, de David Brin, entre otras obras.

(BBCMundo y otros) Nastase cree que las bolas de fuego creadas en el Colisionador de Iones Pesados Relativistas (RHIC) en Brookhaven, Nueva York, tienen bastante similitud con los agujeros negros.

Las bolas creadas allí tienen una temperatura 300 millones de veces más caliente que la superficie del Sol.

Sin embargo, la bola de fuego es apenas perceptible, pues tiene una duración de mucho menos de una trillonésima de segundo.

Esto quiere decir que no afecta la materia alrededor de la misma manera que un agujero negro, pero Nastase cree que tienen algo poco usual.

Sin peligro...

El RHIC es un acelerador de partículas que acelera iones de oro hasta un 99,5 % de la velocidad de la luz.

A esta velocidad, dos haces de iones que se mueven en direcciones opuestas chocan entre sí y se dividen en partículas llamadas quarks y gluones.

En ese momento, el núcleo queda suspendido en un estado de la materia que no existe desde momentos después del Big Bang.

En ese estado, la bola de fuego absorbe partículas, y así es que se detecta su existencia.

Según Nastase, la clave está en que la bola creada en el RHIC absorbe diez veces más partículas que lo que se predijo según los cálculos de física cuántica.

El científico explica que esas partículas luego reaparecen como radicación térmica, de la misma manera que sucede con los agujeros negros en el espacio.

Pero para quienes temen ser tragados por agujeros negros en nuestro propio planeta, no hay motivo para preocuparse, pues Nastase se mueve en un terreno puramente teórico.

Por otra parte, los científicos advierten que de tratarse de un agujero negro de ese tamaño, la gravedad no es la fuerza dominante y no puede alterar la materia alrededor.