26/Jun/05

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Sábato festejó 94 con vecinos y llamadas desde el exterior

Fue en su casa de Santos Lugares. El escritor se emocionó con una interpretación de Miguel Angel Estrella, desde París. Recibió innumerables saludos yvisitas. El ministro Filmus le regaló un poncho. Kirchner le transmitió un mensaje.

(La Nación) Desde París, los acordes de una obra de Mendelsohn, interpretada por el virtuoso Miguel Angel Estrella, llegaron vía telefónica hasta laaustera casona de Santos Lugares, donde Ernesto Sábato celebró ayer su 94° cumpleaños. Todos los presentes hicieron silencio.

El autor de El túnel se emocionó y habló luego con Estrella y su nieto Guido Sábato, hijo del realizador Mario Sábato, que estudia en Francia con elcompositor y embajador argentino ante la Unesco. Sábato se entusiasmó con la charla telefónica y dijo algunas palabras en francés al despedirse. En París, eramedianoche. En Buenos Aires, a las 19, la velada estaba en su apogeo.

Había comenzado muy temprano —no es una novedad que Sábato madruga cada 24 de junio antes de que el invierno amanezca— con un llamado del presidentede Caritas, monseñor Jorge Casaretto, el saludo de los vecinos y de algunos niños con guardapolvos blancos y abrigos, que, desde la puerta de calle, lecantaron el feliz cumpleaños.

Reconstruir la escena festiva es una tarea en la que se prodiga la prensa cada año para dar cuenta de los detalles de un día que, a los 94 años, adquiere unadimensión mayor. Los cantautores españoles Joaquín Sabina (le compuso un poema) y Luis Eduardo Aute lo llamaron desde el exterior. Y varios rostrosconocidos de otros cumpleaños se dieron cita desde las cinco de la tarde, cuando el escritor concluyó el descanso reparador de la siesta.

El presidente de la Nación, Néstor Kirchner, le hizo llegar vía fax su especial saludo de cumpleaños. "Querido Ernesto: evocar su nombre es recordar a unmaestro, es sinónimo de testimonio y de integridad. Expresar a través de la palabra escrita los más profundos sentimientos, pensamientos, sueños y temores quelos hombres podemos experimentar es un don que se concede a unos pocos. Usted es uno de esos privilegiados".

La carta firmada por Kirchner continuó en otro tramo: "Admiramos su coraje y entereza. Permítame desearle un feliz cumpleaños al argentino que desde suspalabras y sus luchas nos hace sentir orgullosos de pertenecer a esta Nación".

Amigos son los amigos

De la familia Sábato, la gran mayoría dijo presente. Allí estuvieron, entre otros, su hijo Mario y su mujer, Elena Sábato, junto con su hija Luciana y los bisnietosdel narrador, Ignacio y Luciana. Por parte del fallecido Jorge Sábato, el otro hijo del autor de Heterodoxia, estuvo su nieta Marina.

Del grupo de amigos de larga data se hicieron presentes el doctor Abraham Sonis y su esposa, la artista plástica Silvina Benguria, el diplomático Daniel Eliçabey Magdalena Ruiz Guiñazú, entre otros. Otros amigos, como el diplomático Sergio Baur, ex agregado cultural en la embajada en España, y la directora deAsuntos Culturales de la Cancillería, embajadora Gloria Bender, se acercaron a estrechar a Sábato en un abrazo, cuando el comedor ubicado detrás de lacocina estaba ya abarrotado de jóvenes que siguen fervorosamente a su maestro.

Baur comentó al verlos: "Acompañar a Ernesto Sábato cuando le otorgaron en España el Premio Menéndez y Pelayo fue mi primera gestión como diplomático.Fue conmovedor ver cómo lo siguieron miles de jóvenes. Cuando daba conferencias, el auditorio estaba siempre colmado de estudiantes respetuosos que loescuchaban con admiración".

Teresa Anchorena, hoy asesora en temas culturales del ex presidente Eduardo Duhalde, dijo que "lo admirable de Sábato es su compromiso con la vida y suenorme vitalidad". Tanto es así que anteanoche, en un concierto en el Palacio Errázuriz, el escritor se le animó a un tradicional carnavalito boliviano. Su amiga ytraductora al italiano Fausta Leoni, radicada en Buenos Aires, dijo a La Nación: "Ernesto es uno de los escritores más puntillosos con las traducciones.Una vez estuvimos un mes para encontrar el equivalente de una palabra del español al italiano".

Entre otros regalos, el autor de "Sobre héroes y tumbas" recibió un poncho con una guarda pampa de parte del ministro de Educación, Daniel Filmus. Endiálogo con La Nación, Filmus rescató "la personalidad humanista y el pensamiento trascendente de Sábato", y su apoyo a la educación.

Hubo algunas ausencias de amigos de otros años: como la de su biógrafa, la escritora Julia Constenla. Entre los obsequios, hubo botellas de vino y dechampagne, un suéter (regalo de Magdalena Ruiz Guiñazú), antigüedades, ediciones especiales de libros y dulces. Sábato apagó con entusiasmo la velita queacompañó la torta que le regaló La Nación.