15/May/06!f>
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La NASA ofrece 2,5 millones de dólares a quien diseñe el mejor módulo lunar
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Que la NASA quiere volver a poner un hombre en la Luna es un hecho evidente, con el impulso y el visto bueno del propio presidente George Bush. Pero pese a
los avances técnicos y el grado que da la experiencia, las misión no parece tan fácil hoy en día como hace 40 años.
(El Mundo) - Con la Agencia bajo unos brutales recortes de presupuesto, los estadounidenses han decidido aliarse con la agencia espacial china para desarrollar
un nuevo vehículo espacial capaz de volver a mandar hombres a la Luna.
Y como además el empujoncito del capital privado nunca viene mal, la NASA acaba de firmar un acuerdo con la Fundación Ansari para poner en marcha un
concurso de construcción de módulos lunares capaces de emular al 'Eagle' de Armstrong y Aldrin. El ganador, eso sí, no se irá con las manos vacías. Nada
menos que 2,5 millones de dólares esperan al agraciado.
Y es que en eso de involucrar a millonarios amantes del espacio en la carrera espacial la Fundación Ansari ya tiene experiencia. No en vano, su concurso del X
Prize fue el primero y hasta ahora único que consiguió hacer volar al espacio una nave construida íntegramente con capital privado, en el año 2004.
Ahora, los que pretendan hacerse con el premio tienen dos tipos de concurso. Uno de ellos exige el diseño de un vehículo que se pueda lanzar desde un área
determinada, se eleve hasta 50 metros de altura y luego planee durante 90 segundos para después aterrizar en un lugar concreto a 100 metros de distancia. El
segundo nivel, de mayor nivel de dificultad, exige a los competidores una nave capaz de despegar desde un área designada, elevarse 50 metros, planear 180
segundos y aterrizar de forma suave y precisa en una superficie rocosa similar a la de la Luna a 100 metros de distancia.
El ganador de la prueba de nivel 1 se llevará 350.000 dólares, mientras que el que quede en segunda posición ganará 150.000. Debido a su mayor complejidad,
el ganador del nivel 2 conseguirá 1.250.000 dólares, mientras que el segundo premio será de 500.000 dólares y el tercero de 250.000.
El concurso tendrá lugar en el desierto de Las Cruces, en Nuevo México, entre los próximos 12 y 16 de octubre, coincidiendo con la celebración en este mismo
lugar de una peculiar exposición de todo tipo de cohetes y artilugios voladores construidos por particulares, que después se harán volar —o al menos eso se
intentará- en el desierto.
Pero éste no es el único concurso con el que la NASA quiere estimular no sólo al mundo empresarial, sino también a jóvenes ingenieros e inventores que puedan
aportar sangre fresca a la mastodóntica organización. En febrero de este año la Agencia puso en marcha los ‘desafíos del centenario", un total de seis concursos
en los que buscan ideas para nuevos diseños de trajes espaciales, todoterrenos lunares, vehículos capaces de soportar la reentrada en la atmósfera, nuevos tipos
de combustible o placas solares que funcionen correctamente en el espacio.
Los premios oscilan entre los dos millones y medio que se llevará el ganador del módulo lunar hasta los 250.000 dólares para el que encuentre los guantes
capaces de soportar el ajetreo de la vida diaria de un astronauta en la Luna. La idea, dicen los responsables de la Agencia, es motivar a las nuevas generaciones
para captar nuevos ingenieros capaces de relanzar la carrera espacial.
De hecho, la NASA lleva años intentado elegir el diseño del que será la nave espacial que sustituya a los transbordadores espaciales, que tiene previsto ‘jubilar"
en el año 2010. Pero para llevar hombres a la luna, no sólo hace falta una nave capaz de llegar hasta allí sino también tener un módulo que se pueda
desenganchar del vehículo, bajar hasta la Luna y luego volver a elevarse, algo que hasta ahora sólo han hecho el ‘Eagle" y el ‘Apolo", y ya hace casi cuatro
décadas de ello. Ahora sólo falta que en las oficinas de la NASA empiecen a recibir los bocetos del próximo módulo que podrá repetir aquello de ‘Houston, el
Águila ha aterrizado".
Aportado por Eduardo J. Carletti
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