22/May/06!f>
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Microtoxinas, la otra cara de la nanotecnología
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(engadget) - Hasta hace poco todo eran sonrisas en el campo de la nanotecnología.
Los últimos descubrimientos nos hacían presagiar un futuro poblado por edificios ultrarresistentes fabricadas con nanofibras, y nanorobots realizando
complicadas operaciones de microcirugía sin necesidad de procedimientos intrusivos, pero al parecer, los científicos no habían reparado en el potencial tóxico de
las nanopartículas.
Mientras que un bloque de un metal cualquiera en sí mismo no resulta tóxico para un ser humano, una cierta cantidad de nanopartículas (menos de 100
nanómetros) puede suponer un riesgo para la salud, dada su facilidad para ser absorbida por el organismo y a que un mayor cociente superficie-masa aumenta
drásticamente su reactividad.
Por ejemplo, los aparentemente inofensivos nanotubos de carbono han resultado ser peligrosos en ratas de laboratorio a las que han causado daños importantes
a sus pulmones.
La idea de que dentro de poco empezaríamos a ver los primeros frutos de la nanotecnología podría por tanto desvanecerse, dado que prácticamente cualquier
compuesto aparentemente inofensivo en nuestra vida cotidiana podría convertirse en nocivo para la salud en dimensiones microscópicas. Alergias,
intoxicaciones... el mundo de la nanotecnología es una minúscula caja de Pandora, al menos en lo que nos atañe a los consumidores.
¿Y para la industria? La idea de que potencialmente todos los materiales empleados en la creación de nanopartículas pueden ser potencialmente perjudiciales o
peligrosos pone los pelos de punta a los ejecutivos, que ahora podrían verse obligados a realizar caras y extensas pruebas de compatibilidad, no ya para sus
productos, sino también para los materiales empleados.
Si eres ducho en inglés y te interesan los últimos avances en la nanotecnología te recomendamos el artículo publicado en Technology Review, aunque solo sea
para leer algo distinto a lo que nos suelen contar las grandes compañías del ramo.
Aportado por Eduardo J. Carletti
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