10/Jul/06

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Un sistema solar artificial para buscar otras dimensiones

(Tecnoticias) - El concepto de dimensiones extra, allí donde se encuentran otras regiones de la realidad que no podemos percibir, ha hipnotizado durante años a los físicos.

Aunque los conceptos matemáticos lucen bien (si a uno le gustan esas clases de cosas), los científicos desean una evidencia física que puedan medir. ¿Y cómo hacer para comprobar las cuatro dimensiones del espacio, cuando solamente se cuenta con instrumentos de tres dimensiones?

Una idea es utilizar la gravedad, una fuerza que podría realmente llegar hasta otra dimensión y dar a los científicos la evidencia que están buscando.

Con el fin de llevar a cabo este experimento, un par de investigadores cree que la mejor estrategia es comenzar desde el principio, y construir todo un nuevo sistema solar... en miniatura

Con un poderoso nuevo equipamiento y con instrumentos muy sensibles, los astrónomos están descubriendo misterios mucho más rápidamente que lo que pueden resolverlos. Tenemos una comprensión sobre el 4% del universo que está compuesto de materia común, mientras que el otro 96% está compuesto de materia oscura y de energía oscura. Una posible explicación para la energía oscura es que no es para nada un misterio, sino que es simplemente la común y familiar fuerza de gravedad actuando en forma extraña a lo largo de las grandes distancias. Simplemente se necesita una dimensión extra del espacio, una que no podemos ver con nuestros instrumentos actuales.

Este sistema solar en miniatura estaría encerrado dentro de una nave espacial más grande que lo protegería de los rayos cósmicos, del polvo, del viento solar, y de cualquier otra cosa que pudiera interactuar con los "planetas" en órbita. Incluso el tanque de combustible de la espacionave, que disminuiría su masa con el correr del tiempo, debería ser posicionado tan lejos como fuera posible de los mini-planetas de modo que éstos no experimentaran una gravedad cambiante.

Una vez en el Punto Lagrange L2, la nave desplegaría los mini-planetas en órbitas elípticas dentro de su caparazón protectivo. Aún si las órbitas no fueran perfectas, la nave tendría láseres con los que podría realizar pequeños cambios utilizando la presión de la luz. Las posiciones de los mini-planetas podrían ser rastreadas con tremenda precisión durante el curso de varios años. Cualquier anomalía gravitatoria se incrementaría con el tiempo, ofreciendo a los cosmólogos montañas de información con datos sobre el impacto de una dimensión extra.

Además de esta función principal, el sistema solar artificial ayudaría a los cosmólogos a comprobar otras teorías sobre la gravedad, las dimensiones extra, la energía oscura y la materia oscura.

Aportado por Eduardo J. Carletti