02/Sep/06

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Raras nubes de gran altitud en la atmósfera marciana

Científicos planetarios han descubierto las nubes más altas sobre cualquier superficie de un planeta.

(Astroenlazador) - Las encontraron sobre Marte empleando el instrumento SPICAM a bordo de la sonda espacial Mars Express de la Agencia Espacial Europea (ESA). El resultado es una importante pieza del puzzle acerca del complejo funcionamiento de la atmósfera marciana. Los resultados de este estudio se presentan en la revista Icarus.

Hasta ahora los científicos sólo habían investigado aquellas nubes que se forman próximas a la superficie marciana. Gracias a los datos obtenidos con el espectrómetro SPICAM se ha podido localizar una capa muy poco frecuente de nubes compuestas de dióxido de carbono a una altura entre 80 y 100 km.

SPICAM realizó el descubrimiento observando estrellas distantes antes de que éstas desaparecieran por detrás del limbo marciano. Estudiando los efectos que el aire atmosférico produce en la luz estelar este instrumento pudo mostrar información sobre las moléculas presentes a diferentes altitudes en forma de perfiles atmosféricos.

Los primeros datos sobre esta capa de nubes se obtuvieron al observar que en algunos perfiles la luz de la estrella seleccionada se debilitaba notablemente, al hallarse detrás de la capa atmosférica situada a 90-100 km de la superficie. Aunque esto sólo tuvo lugar en uno por ciento de los casos, fue necesario obtener hasta 600 perfiles para asegurarse de que el efecto era real.

«Si quisiésemos observar estas nubes desde la superficie de Marte tendríamos que esperar hasta que el Sol se hubiese puesto.», explica el científico de SPICAM Franck Montmessin, perteneciente al CNRS y autor principal de estos resultados. Esto se debe a que las nubes observadas son muy débiles y sólo podrían ser vistas cuando reflejan la luz solar sobre un cielo muy oscuro. A ese respecto, resultan similares a las nubes mesosféricas frecuentemente observadas en la Tierra conocidas como "nubes noctilucientes". Estas últimas se forman a unos 80 km altura sobre la superficie terrestre, en donde la densidad atmosférica es muy similar a la que presenta Marte a 35 km de altura. El descubrimiento de la Mars Express muestra que estas nubes se forman en una zona atmosférica mucho más rarificada.

A 90-100 km sobre la atmósfera marciana la temperatura es de aproximadamente -193°C, lo cual significa que las nubes probablemente no están formadas por agua sino por dióxido de carbono que se congela por debajo del su punto de condensación. Las propias medidas del espectrómetro han servido para plantear una hipótesis sobre la formación de estas nubes: el instrumento ha detectado una población de pequeños granos de polvo de tamaño nanométrico situada a una altura de 60 km sobre la superficie, que podrían ser los núcleos que permiten el crecimiento de los cristales de dióxido de carbono, los cuales posteriormente formarían nubes. Estos núcleos procederían de las propias rocas situadas en la superficie marciana y habrían sido transportados hasta tales altitudes por los vientos fuertes que se producen en determinadas estaciones del año.

El descubrimiento de nubes de gran altitud tiene implicaciones para los futuros aterrizajes en el planeta Marte, pues su existencia significaría que la atmósfera podría ser más densa en algunos puntos de lo estimado previamente. Esto tiene también importancia para futuras misiones espaciales debido a que algunas de éstas emplean la fricción de la atmósfera exterior para modificar sus parámetros orbitales, técnica conocida como "aerofrenado".

Aportado por Eduardo J. Carletti