22/Ene/07

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Publicaciones recibidas: "El año del desierto", de Pedro Mairal

La intemperie está a las puertas de la Ciudad de Buenos Aires. Es algo más que la rápida disolución de las casas y los edificios. María, una simple secretaria y traductora, la sufre en carne propia.

Título: El año del desierto
Autor: Pedro Mairal
Editorial: Interzona
Buenos Aires, 2005
273 páginas

Hay novelas que uno no quisiera leer, que producen angustia, desazón, que son durísimas. Y sin embargo no se puede parar. Algo nos impulsa a seguir adelante. Ensayo sobre la ceguera, de Saramago es un buen ejemplo. Algo similar pasa con Plop, de Rafael Pinedo. Incluso se ve de manera patente en algunos relatos post-apocalípticos de la CF clásica. El año del desierto de Pedro Mairal pertenece a esta categoría.

Con mano maestra e impiadosa, Mairal parte de un tiempo que mucho se parece a nuestro presente, y pasa revista a cada una de las penas que tenemos quienes vivimos por estas tierras porteñas y bonaerenses (desde los piquetes a los saqueos, pasando por el autoritarismo de cabotaje y las arbitrariedades del poder de turno) para transformarlas en una suerte de Apocalipsis. Pero ése es sólo el comienzo. Con el correr del relato, termina convirtiéndose en otra cosa: una pavorosa involución. Y es allí donde el elemento fantástico aflora con tal naturalidad que no parece.

La novela de Mairal es una historia a contramano del tiempo, a la vez que un viaje iniciático en el que la protagonista, María, sufre en carne propia las consecuencias de esa involución (social, cultural, tecnológica). Y también es una búsqueda: al fin y al cabo, todo viaje tiene su motivo.

María trabaja como secretaria en uno de los tantos edificios-torre de la Ciudad de Buenos Aires. Pero esta Buenos Aires es una ciudad decadente, a la vez que convulsionada. No hay aquí presidentes que huyen en helicóptero, pero sí hay saqueos, corridas, disparos, desencuentros… Si bien María trata de mantener las apariencias, resulta evidente que algo pasa y que no se puede soslayar. Es la intemperie: una ola invisible que mucho se parece a "la nada" de Michael Ende en La historia sin fin, una suerte de consumación de la decadencia y la disolución que ataca a las construcciones hasta dejarlas reducidas a poco más que escombros. Esa ola está a las puertas de la capital.

Partiendo de esta idea, Mairal construye, desmonta, recicla distintas formas de organización social y cultural, frutos de esa disolución y de la miseria humana. Cuenta las historias de esas personas que a cada momento pierden algo y necesitan reinventarse. Y todo esto lo hace a través de la mirada —al principio ingenua y luego muy aguda— de María. Pero no se detiene allí; la involución desanda caminos a una gran velocidad, de modo que asistimos a grandes transformaciones desde el pequeño punto de vista de una superviviente.

La novela está muy bien relatada y resuelta, con la fuerza suficiente como para crear en el lector una suerte de película. Pensándolo bien, alguna vez me gustaría verla retratada en pantalla grande.

Alejandro Alonso para Axxón y Garrafex News.