03/Ene/08

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La tecnología transforma la biblioteca de la Universidad de Utah

La biblioteca principal de la Universidad de Utah está evolucionando rápidamente de un simple depósito de papel en un lugar donde la gente se reúne en una variadad de situaciones, ruidosas y silenciosas, en grupo o en solitario.

Esta masiva relocalización del espacio es posible sin guardar nada fuera del lugar, sino por medio de la instalación de un sistema de archivado de libros de 12 millones de dólares, conocido como centro de recuperación automatizado.. La tecnología de punta liberará hasta 80.000 pies cuadrados de uno de los edificios más intensamente usados de la Universidad de Utah, la biblioteca Willard Marriott.

El sistema, con un volumen de 2 millones es el centro de recuperacion automatizado más grande de Norte América y otras universidades le están pidiendo a los funcionarios de la Marriott una guía para construir tales sistemas en sus bibliotecas.

Los pisos, alguna vez llenos con pilas sobre pilas de libros están siendo convertidas en aulas de alta tecnologia, salas de estudio en grupo de cristal y una área abierta llamada "Conocimiento Compartido" como parte del plan de renovación de 77 millones de dólares para el año que viene.

"Se va a transformar en un lugar ruidoso. La gente necesita una serie de cosas. Algunas veces quieren trabajar por ellos mismos, otras veces con otros, otras con una laptop", dijo el director de la Biblioteca Marriott, Joyce Ogburn.

HK Systems diseño e instaló el centro de recuperación automático, está construído de grúas de recuperación sobre vías que se mueven rápidamente hacia arriba y haca abajo por cuatro pasillos. Los pasillos son de 130 pies de largo, 35 pies de alto y contiene 19.181 estantes. Una computadora sigue cada ítem, el cual está marcado por un código de barras.

Los usuarios de la biblioteca buscan el material guardado en el centro simplemente pidiendo por su número y los operadores le recuperan el material en 5 a 10 minutos.

"Ciertamente esto es lo más grande que hemos instalado. Hay algunas planificadas que son un poco más grandes", dijo Todd Hunter, de HK Systema, la cual construyó 13 sistemas de recuperación hasta ahora, incluyendo el primero del país, el de la Universidad del Estado de California, Northridge. "Los volúmenes son guardados por tamaño en lugar de su número. La estrategia es obtener el almacenamiento más denso posible y dar acceso al usuario tan rápido como sea posible."

Aunque el conocimiento acumulado aumenta en formatos digitales, la Marriott permanecerá suscinta al mundo impreso.

"Aún adquiriremos decenas de miles de volúmenes cada año" dijo Ogburn.

El sistema automatizado de recuperación de la biblioteca Marriott empezó a funcionar al final del semetre del otoño, luego de que el equipo trabajó semanas cargando un millón de volúmenes en las estanterías.

No sólo libros fueron a las estanterías, sino que también publicaciones de poco uso, documentos gubernamentales, archivos universitarios, microfilms, materia audiovisual y colecciones especiales. Las estanterías son de 6 a 18 pulgadas de alto.

"Hemos sobre especificado las alturas de modo que si la biblioteca evoluciona y los tipos de materiales que juntamos evoluciona, seremos capaces de acomodarlos." dijo Ian Godfrey, el administrador de las instalaciones de la biblioteca, quien supervisa la renovación.

El sistema cuesta alrededor de los 5 dólars por ítem para construirlo, como oposición de los 20 dólares para la construcción de un edificio con pilas tradicionales, de acuerdo con Ogburn. El sistema está diseñado para contener 2 millones de volúmenes, o dos tercios de la colección de la biblioteca, la institución pública más grande de Utah.

The system cost about $5 per item to build, as opposed to $20 to construct a building to house traditional stacks, according to Ogburn. The system is designed to hold 2 million volumes, or two-thirds of the library's collection, Utah's largest at a public institution.

Para alojar el centro de recuperaciòn automático, la biblioteca agregó una caverna en el lado sur.

Las luces se mantienen bajas y el lugar tiene su propia calefacción y aire acondicionado para mantener la temperatura y humedad constante, extendiendo así la vida de los libros guardados allí, dijo Godfrey.

. Fuente: Salt Lake Tribune . Aportado por Gustavo Courault