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Falleció el escritor británico Arthur Clarke
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La noticia dio vuelta al mundo tan rápido que, como el vivía en Oriente y el cambio de día se produce antes, al continente americano llegó con fecha del día
siguiente.
Sir Arthur Charles Clarke, más conocido como Arthur C. Clarke, falleció el 19 de marzo de 2008. Era un escritor e inventor británico, autor de obras de
divulgación científica y principalmente de obras maestras de la ciencia ficción, como Cita con Rama, El fin de la infancia, o 2001: Una odisea
del espacio.
Había nacido el 16 de diciembre de 1917 en Minehead, Somerset,.Reino Unido.Desde 1956 vivía en la isla de Sri Lanka (antigua Ceilán), en parte por su interés
por la fotografía y la exploración submarina, en parte por su fascinación por la cultura india.
Comenzó a escribir ciencia ficción cuando Europa estaba en guerra. Su primer cuento publicado fue "Partida de rescate", que apareció en el número de mayo de
1946 de la revista norteamericana Astounding, que le sirvió como punto de partida de una fructífera carrera. Entre sus primeros relatos destaca El
centinela (The Sentinel), que sirvió de base para su novela 2001: Una odisea espacial (1968), derivada a su vez del guión de la película del
mismo nombre del director Stanley Kubrick.
Son remarcables en su carrera las novelas utópico/humanistas de los '50, como El fin de la infancia y La ciudad y las estrellas. En los '70, siendo
considerado ya unos de los maestros de la ciencia ficción dura, creó obras como Cita con Rama y Fuentes del paraíso.
Homenaje: Gracias, Sir Arthur
En el vacío poblado del Espacio, dos civilizaciones están de duelo: los humanos y los ramanes. Murió un maestro, un gran científico y un creador en muchos campos de la ciencia y de la ficción. David Bowman, el hombre que encontró a TMA-2 y trascendió lo humano; Vannevar Morgan, el ingeniero que creó la Torre Espacial (Las Fuentes del Paraíso) y abrió el Universo a la humanidad; el comandante de la Endeavour, que consultaba sus decisiones con el Capitán Cook antes de abordar Rama I; HAL 9000, pobre inteligencia pura forzada más allá de los límites por la mentira humana; la Princesa Senoufo, amante de un Rey y Reina en las estrellas, y tantos otros personajes que se escapan de las páginas, trascienden las historias por su carnadura. Gracias, Sir Arthur, por tanta maravilla.
Guillermo Rothsche.
Montevideo, 19/03/2008
Fuente: Axxón. Aportado por Eduardo J. Carletti
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