Orden COLEOPTERA Linnaeus, 1758
Suborden POLYPHAGA Emery, 1886
Serie CUCUJIFORMIA Lameere, 1938
Superfamilia TENEBRIONOIDEA Latreille, 1802
- ARCHEOCRYPTICIDAE Kaszab, 1964
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- Antenas con 11 segmentos y una maza de 3 segmentos. Inserciones antenales cubiertas.
- Porción visible de la procoxa globular con el trocantín cubierto.
- Cavidad procoxal externamente cerrada e internamente cerrada.
- Mesocoxas separadas por 0,4 a 1 ancho coxal, con la parte lateral de la cavidad mesocoxal abierta.
- Fórmula tarsal 5-5-4.
- Número de ventritos 5 con 2 connados.
- Longitud del cuerpo 1,5 a 3,8 mm.
- Ovalados a oblongos, ligeramente aplanados, pubescentes.
- La pubescencia fina y decumbente, algunas veces con apariencia de mármol.
- Los Archeocrypticidae parecen ser muy relacionados a Mycetophagidae,
pero difieren en que presentan tarsos 5-5-4 y las cavidades procoxales están cerradas
posteriormente. El proceso proesternal se extiende más allá de las coxas, no se curvan
atrás de ellas (como en la mayoría de Tenebrionidae) y se expande lateralmente
para cerrar las cavidades por atrás.
- Los Archeocrypticidae fueros incluidos anteriormente en la subfamilia
Diaperinae de Tenebrionidae ya que se asemejan mucho en apariencia. Son
de tamaño pequeño, de forma oval y convexa, de color café oscuro o negros y cubiertos
dispersamente con setas cortas y finas. Los últimos 3 segmentos de las antenas son
ligeramente agrandados formando una maza, mientras que en los tenebriónidos raramente
son así. Las membranas de las 3 últimas articulaciones del abdomen son visibles a
diferencia de Tenebrionidae en que sólo son visibles las últimas 2 articulaciones
o no son visibles del todo.
- Los arqueocriptícidos son similares en tamaño y forma a los Phalacridae, pero
estos últimos tienen una fórmula tarsal de 4-4-4, son mucho más aplanados y tienen
setas más largas y más erectas en los élitros. Superficialmente se parecen a pequeños
Monommatidae (= Monommidae), pero los monómidos tienen surcos en las parte ventral donde pueden
ser alojadas las antenas y las patas anteriores.
- En Centroamérica se encuentra el género Enneboeus, que han sido encontrados en
el mantillo del piso del bosque y en materia vegetal en descomposición tal como
acumulaciones de flores caídas. Los adultos son atraídos de vez en cuando a las
luces. No se conocen detalles de la biología de estos coleópteros poco comunes.
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Enneboeus uniformis, © Biologia Centrali-Americana
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