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Publicaciones recibidas: "Esperanza del venado" de Orson Scott Card
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Con traducción mejorada y una nueva edición (de Bibliópolis), llega esta novela de fantasía heroica del autor de El juego de Ender.
Título:
Esperanza del venado
Autor: Orson Scott Card
Título original: Hart's Hope
Traductora: Tina Parcero
Ilustración de cubierta: Mercedes Rodrigo
Diseño de cubierta: Alejandro Terán
Diseño de colección: Alberto Cairo
Editorial: Bibliópolis
Colección: Bibliópolis Fantástica n° 46
256 págs.
Esta es la reseña de una relectura. Leí esta novela en 1991 o 92, en una edición de Nova Fantasía (Ediciones B). En aquel momento no me gustó, y es por eso
que abordé la relectura con cierta resignación. Pero tuve la grata sorpresa de encontrar una lectura mucho más interesante y entretenida de lo que esperaba.
En esto debe haber una gran parte de maduración mía, es muy probable que en el momento en que la leí no estuviera en condiciones de apreciarla. Aunque
también, hojeando la vieja edición, encuentro que la traducción de Bibliópolis es mejor. La otra tenía varios errores, traducía algunos de los nombre y otros los
dejaba en inglés, y generaba una cierta pesadez y rigidez de estilo que puede haber contribuido a mi aburrimiento.
Además de la traducción mejorada, la nueva edición tiene todas las características agradables a las que Bibliópolis nos acostumbró, pero que me siento
obligado a mencionar en cada reseña. Por un lado para que no aflojen, pero por otro lado, por agradecimiento y reconocimiento al buen trabajo. Tenemos buen
papel, una bella y adecuada ilustración de tapa, buena impresión, tipo de letra agradable y legible y escasísimos errores de imprenta (o ninguno).
Volviendo a mis impresiones y buscando el porqué de mi negativa lectura inicial, recordé que la presencia tan manifiesta de la religión, el componente
moralizante y la intención de fábula a cada página, me habían fastidiado bastante. Y por cierto que eso está, como en casi todas las obras de Scott Card. Ese
hombre no puede (o no quiere) escribir sin hacer una fábula, una alegoría y transmitir un cierto mensaje moral. A veces degenera en moralina, a veces es más
equilibrado. Lo que pude notar ahora en esta novela es que hay muchas otras cosas que balancean esto. Card no sólo es un escritor de fábulas, también es un
Narrador con mayúscula. Uno de esos tipos que cuentan por enésima vez la misma historia que todos conocemos, el mito del héroe, el viaje iniciático… Y así y
todo le da un toque nuevo, la revitaliza, se la apropia y la recrea.
Uno ya sabe desde el principio cómo va a terminar todo. En parte porque se empieza desde el final y se narra en retrospectiva, en parte porque es (casi) todo
muy previsible. No es el suspenso lo que motoriza y engancha al lector. No es tampoco el ritmo de la narración, que deriva en sucesos secundarios, en visiones,
en historias laterales, sueños y fábulas. Es el poder del lenguaje y de la historia. Es el armado de la visión general a través de los personajes. Y ahí está la mejor
parte de este trabajo de Scott Card. Los personajes son heterogéneos, pero todos son muy interesantes. Incluso los secundarios que aparecen en un tramito de
la historia y luego no vuelven, dejan su marca en la historia, son distinguibles y reconocibles.
Es una fantasía heroica, aunque no una epopeya. No hay combates. Hay mucha magia, todo el tiempo, es uno de los ejes de la narración. Pero tampoco
aparecen duelos de magos (con un par de excepciones). Casi todos los conflictos se resuelven en un plano mágico, simbólico, con la intervención de los dioses.
Los dioses son personajes muy importantes en esta narración. Aparecen poco, pero son los que deciden y arman todo. Son unos dioses extraños, derrotados y
reducidos por una poderosa maga y luego reina. Privados de casi todo su poder, maniobran en las sombras con lo que les queda, forzando la procreación de
quien los liberará y conduciéndolo luego. Muy lejos de un Júpiter tronante o inclusive de un Quetzalcoatl.
La historia tiene permanentemente el tono de la narración verbal, el tono de la leyenda. Hay mucho trabajo de forma para ello, y está bien hecho. Casi todos los
sucesos tienen una carga directa en la narración, y otra simbólica. Los conflictos, las oposiciones y las aventuras son permanentes. Y hay algo encantador, que
me recuerda a El Señor de los Anillos, en el hecho de que todos los grandes y los poderosos suben y bajan (incluso los dioses), pero la salvación de
todos está en las manos de un pequeño, casi un niño, con un poder especial que no le permite hacer nada… excepto consumir la magia de otros.
La novela comienza con la narración de sucesos previos a una rebelión contra un rey. Esa rebelión, luego de idas y vueltas, finalmente triunfa. El nuevo rey
humilla a la hija del anterior, pero la deja viva en un equivocado acto de piedad. Ella encuentra un terrible forma de obtener poder mágico supremo, vence y
humilla a los dioses y magos y toma el trono como Reina Belleza. Un reinado apoyado en su magia, no más ni menos tiránico que otros, aunque se deleita en
vengarse de los anteriores rebeldes. Una parte de esa venganza es prolongar su vida, así pasan cientos de años de reino mágico y rebelión impotente. Hasta que
llega el salvador, que pasa por su iniciación en la adultez y cumple con su destino.
Estas son las líneas de la novela. Como dije, una historia común, muchas veces contada. Pero la belleza de las descripciones, de las imágenes, la poesía de las
visiones y sueños y profecías, la justifican. Y el armado de los personajes y situaciones la hacen una gran obra.
Una vez más, tenemos fantasía heroica lejos de los elfos y los héroes de ancha espada. Esta fantasía está más emparentada con la leyenda y el mito que con la
lucha.
Párrafo aparte merecen algunos nombres. Siempre me he preguntado cómo hacen los autores para encontrar los nombres adecuados para los personajes,
nombres resonantes, nombres que no se olvidan. En este caso, los nombres de Palicrovol, Asineth e inclusive Orem resuenan y resuenan en mi memoria, incluso
desde la primera lectura.
Aunque sigo prefiriendo Maestro Cantor, creo que esta es una de las mejores novelas de Scott Card y que vale la pena leerla para encontrar fantasía
heroica de la mejor.
Por Carlos Ferro para Axxón y Garrafex News.
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Más información:
Esperanza del venado en Bibliópolis