09/May/07!f>
|
Revista Axxón
Axxón en facebook
Lectores de Axxón en facebook
|
|
Publicaciones recibidas: "Aterrizaje de emergencia", de Algis Budrys
!t>
Cuatro extraterrestres quedan varados en nuestro mundo. Partiendo de esta sencilla premisa, Budrys presenta un mosaico de informes, notas periodísticas, expedientes, declaraciones, todo alternado con
reconstrucciones "de memoria" de los personajes, para que sea el lector quien arme la novela. Completan el volumen, editado por Cuásar, un cuento, un artículo y una detallada bibliografía.
Esta es una reseña largamente demorada (por razones personales) del segundo
libro publicado por Ediciones Cuásar. El volumen contiene la novela que le da título, un cuento llamado "Los silenciosos ojos del tiempo", un jugosísimo artículo introductorio del editor Luis Pestarini y
una bibliografía completa y detallada del autor.
Había leído poco pero bueno de Budrys, así que comencé la lectura con interés y altas expectativas. El artículo de Pestarini al inicio, intitulado "El ser humano como centro de la ciencia-ficción", no hizo
más que aumentar ambas cosas. En realidad, hizo algo más: me introdujo a interesantes detalles sobre la vida y obra del autor, y me puso un poco en situación de la época en que fue escrita la novela.
Luego empecé con esta novela de estructura fragmentaria, con diversas voces y tonos de narración. Con los dos primeros fragmentos me parecía estar en un capítulo de Los Expedientes X, luego
de a poco se fueron introduciendo los personajes (y narradores) principales. Si bien la narración dispuesta en fragmentos breves hace que no sea una de esas novelas que no se pueden parar de leer,
también acrecentó mucho mi interés por armar este rompecabezas, por enlazar las distintas historias, por reconstruir hacia atrás y ver hacia delante cómo se engarzan los sucesos. Técnicamente es todo
un logro, me parece mucho más difícil hacer una novela de esta manera (y además manteniendo el interés del lector) que con una narración convencional. Porque en la novela hay de todo: informes
científicos de autopsias, notas periodísticas, pedazos de expedientes, declaraciones, todo alternado con reconstrucciones "de memoria" de los personajes.
Todo esto se va armando en la mente del lector. No es un rompecabezas, no desafía el ingenio del lector; de hecho es bastante fácil seguirla después de los choques iniciales y cuando uno entra un poco
en la situación. Pero para ese entonces, el lector ya se encariñó y se interesa por los personajes y sus andanzas.
Se trata de una tripulación extraterrestre de cuatro integrantes que sufre un accidente en la Tierra, a principios de los 50. Su nave cae y deben destruirla, sacando los restos del alcance de la población
local. Luego deben separarse y sobrevivir sin llamar la atención. Esto no es por ninguna directiva benévola, como la Federación de Star Trek: es por supervivencia. Los alienígenas saben que, de ser
reconocidos, lo más probable es terminar como ratones de laboratorio y/o entregando tecnología con la que los nativos podrían dañar a sus amigos y familiares, en última instancia.
Es poco lo que se nos cuenta de la civilización de estos extraterrestres, que son casi iguales en aspecto a los humanos, que han estudiado nuestra civilización por el tiempo suficiente como para manejarse
en ella y que sólo pueden ser distinguidos por algunos detalles anatómicos visibles en autopsias o radiografías. Son los alienígenas perfectos para mostrarnos costados humanos en una situación distinta. Y
aquí entra en juego la imaginación de Budrys, ya que con esta base la novela podría disparar para cualquier lado. Él no intenta hacer un buen retrato de los alienígenas como tales, como distintos de los
humanos. Al contrario, rescata lo más humano que hay en ellos, los hace personajes con los que el lector se puede identificar fácilmente, que puede entender… que no son realmente alienígenas, ni
extranjeros en tierra extraña. De cada uno de ellos hace un personaje y una narración de cómo enfrentan las dificultades y se integran, según sus diversas personalidades, a nuestra sociedad. Sobra la
ironía en este proceso de adaptación, ya que se cumple con el recurso del ET como espejo deformante. Pero también hay una narración prolija, inteligente, cariñosa y cuidadosa con los personajes,
siempre verosímil, siempre bien construida.
Así, no tengo más que elogios para Aterrizaje de emergencia. La traducción me pareció muy buena, no me chocó en ningún momento. La edición es bastante buena, aunque un par de errores se
escaparon: es muy chocante (aunque poco importante) la pérdida de vocales acentuadas nada menos que en las grandes letras del índice.
Otro concepto me merece el cuento largo que lo acompaña. Muy largo se me hizo, por momentos tedioso. Tal vez me irritó la exposición cruel y deliberada de los mecanismos de empresa, tal vez la
personalidad maquiavélica al extremo del protagonista, tal vez lo previsible de la vuelta de tuerca final. Todo eso me impidió disfrutar de este extenso chiste, porque no creo que sea otra cosa.
Probablemente si lo hubiera leído sólo y no después de la otra novela, no me hubiera chocado tanto por no tener ese elemento de contraste y comparación tan a la mano.
Es una situación en que un ingenioso inventor (el clásico científico loco) descubre un mecanismo para viajar en el tiempo, con ciertas limitaciones. Pero tiene la desdicha de hacerlo en medio de un
ambiente de empresa, como parte de su trabajo. Intenta algo ingenuamente aprovechar su invento para mejorar sus condiciones de trabajo, pero La Empresa se opone utilizando un astuto manager para
desbaratar sus planes y lograr que tal descubrimiento no haga peligrar la marcha del conglomerado. Desfilan por allí varios clichés, de nuevo hay mucha ironía y algunas situaciones graciosas, algunas
cosas muy bien escritas, pero comparándolo con lo anterior, es una obra menor.
Algo más para criticar, ya en un aspecto superficial: la sombría y grisácea tapa del ejemplar hace difícil que llame la atención del potencial comprador.
Por lo demás, y a pesar de mi apreciación un tanto adversa del segundo cuento, me parece que es un libro imprescindible, que solamente por la novela y sin siquiera incluir el artículo de introducción y la
bibliografía, justificaría ampliamente el muy accesible precio de su compra.
Fuente: Axxón. Aportado por Carlos Ferro para Axxón y Garrafex News.
!c>
Más información:
"Aterrizaje de emergencia", de Algis Budrys, en Ediciones Cuásar