Los petroglifos de Gobustán, en Azerbaiján, se remontan a la Edad de Piedra. Fueron descubiertos en 1930, por casualidad, por un grupo de obreros en una cantera. Uno de los trabajadores informó que había hallado talladuras inusuales en las rocas. Se hallaban en el interior de cavernas cavadas por los hombres. Ante el descubrimiento, se interrumpió el trabajo en la cantera para examinar mejor las imágenes.
En 1939, el arqueólogo Isaak Jafarzade comenzó la primera investigación científica de estos petroglifos. Entre 1940 y 1965 se identificaron y documentaron aproximadamente 3.500 imágenes dibujadas en 750 rocas. Se determinó que el petroglifo más antiguo fue grabado entre 800 y 1200 años antes de Cristo. (Los botes de juncos de esta imagen son similares a los de imágenes encontradas en Escandinavia.)
Imágenes de bailarines,
quizás en alguna clase
de ritual de iniciación.
La hilera inferior muestra
figuras de cazadores.
|
|
|