12/May/05

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Robots que cambian de forma y se autoensamblan

Un equipo de investigadores de la Universidad de Cornell en Ithaca, Estados Unidos, ha desarrollado un sistema mecánico que se 'autorreproduce'. Sería ideal, dicen, para robots utilizados en tareas especialmente complicadas, o en viajes espaciales.

(Nature, El Mundo) Según publica en su edición de esta semana la revista Nature, cada uno de los robots está formado por varios cubos de 10 cm de lado que tienen una maquinaria idéntica, así como una serie de electroimanes que, de forma selectiva, debilitan y fortalecen conexiones entre los cubos, determinando de este modo dónde se unen y separan las estructuras. Los dados tienen también un programa informático que es el que 'produce' la autorreplicación, es decir, que permite a los cubos doblarse para 'recoger' otros cubos y apilarlos encima de ellos mismos.

Como los autores apuntan, su máquina evidencia que la autorreproducción no es sólo para los seres biológicos, ya que aunque de forma simple, su mecanismo mecánico cumple esta función. Eso sí, los módulos necesitan el 'suministro' de material para poder replicarse, en este caso unos módulos similares a los que forman el robot que se colocan manualmente en las cercanías del mismo, para que éste los absorba o los utilice para fabricar su 'replicante'.

Los robots experimentales, que de momento no pueden hacer otra cosa que hacer copias de sí mismos, reciben energía a través de pequeños contactos que existen en la superficie sobre la que reposan, y son capaces de enviar y recibir información utilizando módulos adicionales colocados en "lugares de alimentación" especiales.

El proceso de reproducción es bastante sencillo. El robot-torre, compuesto por varios cubos unos encima de otros, se dobla sobre sí mismo hasta que el ecubo que esté arriba del todo toca la mesa. Entonces la torre inicial se desprende de un cubito que empieza a crecer y doblarse por sí mismo para ir añadiendo piezas a su estructura, mientras que el cubo 'primigenio' prosigue su crecimiento a base de doblarse y tocar el suelo.

"El robot de cuatro módulos fue capaz de construir una réplica de sí mismo en dos minutos y medio", aseguró a la revista Hod Lipson, uno de los investigadores.

Los científicos han asegurado que este tipo de estructuras pueden ser utilizadas para fabricar robots que se autorreparen o que puedan ser utilizados en condiciones de extrema dureza, como los viajes espaciales.

Hasta ahora, los científicos habían logrado la autorreproducción en dos dimensiones, con unas pequeñas baldosas de madera, pero en ningun caso los ingenieros habían logrado resolver el problema de cómo continuar el proceso luego de sus primeros pasos.