09/Nov/05

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Científicos alemanes trabajan en el desarrollo de computadoras orgánicas

Científicos desarrollan computadoras orgánicas, llamadas así porque emulan procesos biológicos.

(Notimex) - El desarrollo dará mayor seguridad y autonomía a sistemas de telecomunicación, al ser capaces de autogestionarse y adaptarse a los cambios tal como lo hace un organismo.

El Instituto de Sistemas de Telecomunicación de la Universidad Técnica de Berlín, junto a otros 17 grupos de investigación alemanes, busca en un proyecto conjunto nuevos principios de organización para redes informáticas, hardware y software.

El proyecto de investigación tiene por objetivo desarrollar un sistema computacional que se organice, optimice, repare desde sí mismo, y también pueda adaptarse a las condiciones ambientales.

Según el profesor Hans-Ulrich Heiá, de la Universidad Técnica de Berlín, manifestó que "esto podría conseguirse mediante sistemas de computación orgánicos, que emulen los procesos biológicos de la naturaleza".

Es por ello que los investigadores alemanes analizan el funcionamiento biológico del cuerpo humano, el proceso de curación, desde las células cutáneas hasta un accidente, o la adaptación térmica del organismo.

"En la búsqueda de principios de autoorganización están también las colonias de hormigas, que encuentran siempre el camino más corto entre el alimento y el hormiguero, sin seguir una regla central, comparó el investigador Heiá.

La sustancia aromática, llamada feromona, que dejan a su paso las hormigas tiene en ello una importante función de guía, ya que una alta concentración de la misma en el camino es interpretada por el animal como el trayecto correcto.

Los investigadores transforman esa concentración en números, y desarrollan con ellos algoritmos de ruta para redes informáticas.

De este sistema, se ha aprovechado también la compañía aérea estadounidense Southwest Airlines, que ha deducido el tramo de carga aérea efectiva del funcionamiento de las hormigas. De ese modo, un software podría calcular también un nuevo tramo de red.

El campo de investigación de computadores orgánicos no es sólo teórico, sino que tiene importantes posibilidades de aplicación, tanto en el ámbito industrial como doméstico, que pueden transformar las relaciones actuales entre los individuos y la tecnología.

La Sociedad de Informática (GI) y la Sociedad de Tecnología de la Información (ITG), ésta última ubicada en la Asociación de Tecnología Electrónica (VDE), en Alemania, sostienen que los sistemas de computación orgánicos podrían ser utilizados en cinco años.

Con computadoras orgánicas, sería posible crear, por ejemplo, centros comerciales inteligentes, donde cada artículo fuera identificado y supervisado en todo momento, así los estantes, las mercancías, carros de la compra y recibos se comunicaran entre sí.

Este principio de autoorganización se podría implementar también en robots de uso doméstico, que autogestionaran y optimizaran sus funciones.

La VDE pronosticó que para el año 2010, "ya no habrá software estándar que haya que configurar continuamente, éste residirá sobre los nodos de la computadora orgánica".

Se requerirá, sin embargo, el desarrollo íntegro de una nueva generación de chips, que destaque por una alta capacidad de adaptación, robustez y tolerancia de fallos.

Investigadores del Instituto de Informática Aplicada y Método Descriptivo Formal (AIFB) de la Universidad de Karlsruhe, al sur de Alemania, ampliaron asimismo la perspectiva de aplicación del principio de autoorganización a todos los sistemas.

No sólo las computadoras tendrían capacidad de autogestionarse y autonomía de funcionamiento, sino que también otros instrumentos, como el automóvil o la electrónica doméstica, ganarían eficacia en su funcionamiento con la aplicación del mismo principio, apuntaron.

Los aparatos podrían así interconectarse con autonomía y no sería necesaria en la red la presencia de un computador central que comande el sistema, ni la actuación conjunta de sensores e individuos, como ocurre actualmente.

"La inteligencia estará activa en los instrumentos cotidianos", predijo el investigador Heiá, para quien la ciencia ficción clásica está al alcance de la ciencia y de la sociedad que se beneficia de ella.

Aportado por Eduardo J. Carletti