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Entrevista con
Bruce Sterling

por Equipo Axxón

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Axxón: ¿Cuánto se parece y cuánto se diferencia el mundo cyberpunk de computadoras insertas en la vida personal, redes de conexión entre personas e implantes electrónicos que se imaginaban usted y otros autores al momento de surgir el movimiento y el que ahora vivimos? ¿Nos puede marcar algunos ítems clave en los que los panoramas se asemejan mucho y otros en los que se diferencian?

Bruce Sterling: Bueno, nunca existió un solo "mundo cyberpunk computarizado". Por ejemplo, siempre pensé que Pat Cadigan tenía un "mundo cyberpunk computarizado" verdaderamente interesante y único, donde la gente usa las computadoras para explorar los paisajes psíquicos mutuos. Desde luego, ni remotamente ha ocurrido nada de eso en la vida real, pero el libro Mindplayers de Pat tiene material muy bueno y visionario en términos de ciencia ficción..

El clásico tema ciberpunk de los implantes electrónicos no tiene relevancia. Ni siquiera el implante de un diminuto chip de identificación por radiofrecuencia tiene el menor sentido como tecnología del mundo real. No es práctico tener un equipo de computación subcutáneo que interactúe directamene con la carne humana, que es húmeda y salada. La maquinaria se deteriora demasiado rápido como para mantenerse dentro de un cuerpo, un cuerpo humano que puede vivir ochenta años. Los implantes tienen sentido como metáfora literaria. Como tecnología, son un fiasco.

Otra apuesta fallida del cyberpunk fueron las corporaciones feudales donde la gente sentía una devoción fanática y de por vida hacia sus empleadores corporativos. Ese modelo japonés de desarrollo cultural ni siquiera funcionó en Japón. Las corporaciones no son más fuertes que las naciones. Las corporaciones son frágiles y débiles. Los inversores y accionistas son mucho más fuertes que las corporaciones.

Una cosa donde el cyberpunk dio muy bien en la tecla fue en que las naciones-estado entrarían en decadencia. Hoy en día, verdaderamente, las naciones-estado se encuentran en peligroso retroceso. Cada vez hay más regiones del mundo donde la ley y el orden han fracasado casi por completo y donde la vida es siniestra y no vale nada. En aquel momento, la gente se quejaba de que el cyberpunk tenía una imagen oscura del futuro, pero es difícil encontrar una obra cyberpunk alguna vez publicada que sea tan oscura como lo es Irak actualmente. Más bien se está demostrando que nuestra obra era demasiado alegre y optimista comparada con el mundo de hoy.


Axxón: El año pasado se editó en español Schismatrix, veinte años después de su publicación original. En esa novela usted exhibe una variedad deslumbrante de registros y percepciones y se atreve a crear futuros de sorprendente complejidad. ¿Usted se sigue representando el mañana con la misma orientación especulativa o conjetura que los últimos veinte años, que modificaron la realidad a su capricho, han disparado las variables en otra dirección?

Bruce Sterling: Nunca he sido un determinista histórico. Trato de forjar escenarios plausibles que puedan expandir los parámetros de pensamiento de la gente. No se puede predecir el futuro, pero se puede expandir la aptitud de la gente para interpretar lo que podría ocurrir, o lo que ocurrió, o lo que está ocurriendo ahora.

Esa es una de las razones por las que me gusta escribir obras ubicadas en el pasado tanto como en el futuro. No existe un único futuro prescripto y tampoco existe un único "pasado" prescripto.

Se podría escribir una novela especulativa sobre los Conquistadores desde el punto de vista de Montezuma, o de Cortez, o de Malinche. Esas tres obras, ambientadas en el mismo momento histórico, difícilmente tendrían una sola palabra o idea en común. Malinche, que era intérprete, podría tener una especie de postura intermedia, pero puedo garantizar que Malinche tenía muy poca idea de lo que realmente estaba pasando con la Conquista de México. Lo último que ella esperaba en el mundo era convertirse en la amante de un invasor blanco que tenía un arma y un caballo. Estoy seguro de que ella lo consideraba de una originalidad deslumbrante y de una complejidad asombrosa.


Axxón: En su universo de una Humanidad dividida en Formadores y Mecanicistas, ambas formas de evolución suenan muy plausibles. ¿En su pensamiento particular, no tanto como autor sino como persona con conocimientos sociales, técnicos y científicos, cuál forma de modificar el Ser Humano cree que es más plausible que aparezca en poco tiempo? Y de aparecer ambas y existir esa división, ¿cree usted que alguna de las dos lograría imponerse como preponderante?

Bruce Sterling: Me inclinaría por que las modificaciones genéticas se llevarán las palmas. Hoy en día existen algunas prótesis muy interesantes, pero no creo que los aditivos mecánicos tengan una real posibilidad de modificar seriamente a las personas de modo permanente e irrevocable. Pero las hormonas, el comportamiento neural, el estado de ánimo, el metabolismo, los procesos de envejecimiento... todas esas cosas verdaderamente definen a la humanidad. Son centrales para nuestra existencia.


Axxón: ¿Hasta qué punto cree usted en que una literatura que propone conjeturas extremas y a veces revolucionarias acerca de la sociedad y los efectos del desarrollo científico y tecnológico sobre las criaturas que habitan este planeta puede ejercer una incidencia concreta e influir en las decisiones de los que detentan el poder? ¿Cree que llegará un día en el que la situación pueda llegar a ser tan dramática que el Comité de Naciones Poderosas para salvar el Planeta diga: "usted, Sterling (Mieville o Bisson), qué propuestas concretas puede llegar a hacer, ya que se ha pasado la vida tratando de decirnos como sería el futuro?

Bruce Sterling: Bueno, si yo tuviera poder, me vendría bien escuchar a los visionarios, pero ciertamente no les otorgaría poder ejecutivo a los futuristas ni a los escritores de ciencia ficción. Newt Gingrich, ex-legislador norteamericano, es escritor de ciencia ficción. Es un político horrendo, con ideas espantosas en cuanto a cómo debería ser el futuro. El tipo fue un desastre político.

Desde que escribí mi novela sobre una catástrofe de invernadero, Heavy Weather, a principios de los ´90, estoy realmente preocupado por el Efecto Invernadero. Conozco mucho del tema. Supongamos que de verdad se produce un desastre de invernadero y que todo se va al demonio. ¿A la gente importante le interesará lo que yo pensé sobre el tema? Tal vez. Me pondrían en una especie de comité asesor. Si la situación fuera lo bastante mala, hasta podrían enrolarme en el servicio militar.

Pero no me van a nombrar Secretario de Energía ni me van a dar poder que para reforme la industria de los combustibles fósiles. Nunca voy a firmar presupuestos ni a dirigir trabajos de rescate de emergencia. Cualquier propuesta específica de planes de acción que yo hiciera tendría que abrirse paso a través de la estructura política, económica e industrial del mundo real.

Por lo tanto, si meto la mano en mi bolsa mágica de trucos de ciencia ficción y digo: "¡Miren, aquí tengo la fusión fría y de verdad funciona!", alguien tendría que diseñar dispositivos de fusión fría, y aplicarlos, e introducir la propuesta en la industria pesada de consumo masivo. Las grandes ideas y las grandes visiones de sucesos futuros plausibles no convierten a la gente en detentadores del poder. La gente detenta el poder después de procesos que llevan su tiempo, tales como formar redes de aliados, reunir muchos subordinados de confianza, demostrar capacidad administrativa en circunstancias dramáticas, exhibir una aptitud para actuar como un operador honesto entre grupos de interés competitivos y tener una gran habilidad para repartir el botín y para pacificar a los rivales... esa clase de cosas. Yo lo entiendo. Eso no significa que pueda HACERLO. No QUERRÍA hacerlo. Porque he visto cómo lo tergiversan.

Einstein, Oppenheimer y Vannevar Bush sabían que se podía construir una bomba atómica. Los escritores de ciencia ficción también lo sabían. Era una idea extrema, visionaria, con implicancias de largo alcance, revolucionarias. Los científicos hicieron una propuesta específica a la estructura del poder. La bomba apareció en la vida real y transformó al mundo, pero los visionarios no se convirtieron en Presidentes. En realidad, no había ninguna necesidad de que lo hicieran. No habría ayudado en nada


Axxón: Cuando habló de escribir una novela especulativa sobre los conquistadores del nuevo mundo desde el punto de vista de Montezuma, o de Cortez, o de Malinche, ¿significa que se ha interesado por las culturas precolombinas? Si es así, ¿está entre sus proyectos desarrollar alguna historia localizada en ese contexto o en realidad el ejemplo sólo apuntaba a la diversidad de puntos de vista en una misma ficción?

Bruce Sterling: Bueno, yo soy de Texas. Por supuesto que estoy interesado en México. No tengo planeado escribir ninguna ficción histórica sobre los aztecas, pero no dudo que podría hacerlo.

Un desafío verdaderamente interesante sería escribir sobre el México actual desde el punto de vista de un azteca.


Axxón: Usted ya hizo mención a Heavy Weather (1994) y el tema del calentamiento global. En Holy Fire (1996) el poder está en manos de una gerontocracia interesada en el desarrollo de una tecnología médica que permita prolongar la vida mientras que los jóvenes están condenados a la marginación. Pero en su novela más reciente conocida en español, Distraction (1998), parece haber dado un golpe de timón a sus planteos y enfoques con respecto a algunos aspectos de sus obras anteriores, utilizando recursos de la sátira y tomándose las catástrofes con cierto humor. ¿Es así? Y en ese caso, ¿Zeitgeist (2000) y The Zenith Angle (2004) tienen características similares o regresan al sendero distópico?

Bruce Sterling: Nunca he tenido ningún interés por la distopía. Viví en el sur de la India, rodeado de millones de personas sumidas en la pobreza extrema y generalmente afectadas por enfermedades. Creo que nunca leí una "distopía" de ciencia ficción que fuera tan distópica como esa experiencia de la vida real... y sin embargo, no era irremediable. La vida en el sur de la India ha estado mejorando constantemente. El pueblo de la India nunca tuvo un mejor control de su destino que el que posee ahora. Viví allí lo suficiente como para albergar sentimientos patrióticos hacia la India. Me siento verdaderamente orgulloso de ellos.

Y por supuesto que la vida es graciosa. Hasta una vida horrible es graciosa. La gente solía hacer chistes en los campos de concentración. La gente no sobrevive a las catástrofes a fuerza de sobriedad y morbo. Sobrevive a las catástrofes comprendiendo que la vida posee aspectos catastróficos que le son inherentes. Nacer, por ejemplo. ¿Cuántas probabilidades hay en contra de eso? En algún sentido, nacer y comenzar a existir es una especie de calamidad cómica definitiva.


Axxón: En proporción al número de novelas que escribió sus cuentos no son tantos, y muchos de ellos fueron escritos en colaboración con Gibson, Shiner, Rucker, Di Filippo, Kessel. ¿Puede hablarnos de las dos experiencias, escribir cuentos y escribirlos en colaboración con otros?

Bruce Sterling: Siempre desearía poder escribir más cuentos cortos. Tengo docenas de ideas, pero es difícil encontrar tiempo para hacerlo. Con mucha frecuencia, me resulta útil buscar a alguien que me pueda ayudar.

Últimamente la gente ha comenzado a quejarse de que estoy escribiendo cuentos que no parecen de Bruce Sterling. Pienso que esa es una señal saludable.


Axxón: En algún momento William Gibson fue parte de un "Think Tank" de diversos especialistas, artistas y pensadores a quienes que se les encargó definir los escenarios posibles en el mundo futuro. Tengo una vaga idea de que usted también estaba, pero no estoy seguro. Si estuvo allí, o si estuvo sólo Gibson pero usted sabe algo, qué conclusiones (interesantes o no desde la visión de alguien de nuestro género) surgieron de ese "Think Tank".

Bruce Sterling: He participado en docenas de "Think Tanks", literalmente. Involucrarme en escenarios futuristas me ha sido de gran utilidad. Cuando estaba en la facultad de diseño pasaba mucho tiempo enseñando técnicas futuristas a los estudiantes de diseño.

Si realmente están interesados, les recomendaría un libro llamado The Art of the Long View, de Peter Schwartz. El futurismo tiene alguna relación con la ciencia ficción, pero no es literario.


Axxón: Usted ha avanzado con sus novelas y cuentos hasta forzar los límites de la ciencia ficción. Otros escritores han hecho algo parecido en otras direcciones. ¿Qué opinión le merecen los intentos de modificar las pautas mismas del género hasta hacerse irreconocibles, como podría ser el caso de Kurt Vonnegut o Christopher Priest o Stanislaw Lem? Por otra parte, y en cierto modo relacionándose con esto, ¿que siente ante la ciencia ficción embozada o incluso negada de Margaret Atwood, Philip Roth, Michel Houellebecq o Kazuo Ishiguro?

Bruce Sterling: Yo solía preocuparme mucho por este tema, pero ahora siento que, si bien es importante, es responsabilidad de otros.


Axxón: En el año 2000, usted puso en marcha el Movimiento Viridiano, un Proyecto en el que se proclama el fin de la posmodernidad, la necesidad de nuevas ideas tras el fracaso de las izquierdas y la falta de propuestas, tanto de éstas como de la derecha, que parece controlarlo todo. ¿En qué punto está ahora esa iniciativa? ¿Piensa que en alguna medida usted y los que lo acompañan han logrado instalar algunas ideas positivas para contrarrestar el desaliento de estos tiempos sombríos?

Bruce Sterling: En lo referente al cambio climático, el ánimo sombrío y desesperanzado no te salvará del desastre. Las tormentas y la elevación de las aguas destruirán tu casa. No importa si tienes ideas positivas o negativas: cuando el dique se rompe, tienes que mudarte. No es un asunto ideológico. Es un asunto práctico. Los ideólogos de derecha también tienen casas que se derrumban, igual que los de izquierda.

¿Quieres que se rompan más diques o menos diques? ¿Te gustaría que los pobladores del sur de Argentina se quemaran la piel y quedaran ciegos por los agujeros en la capa de ozono, o preferírías que no se quemaran ni quedaran ciegos? Esa es la decisión. ¿Qué tiene que ver con todo eso el hecho de sentirse desesperanzado? No mucho.

La esperanza bien entendida no significa que el mundo cambie y se vuelva perfectamente gratificante para ti. Tener esperanza significa que uno entiende que lo que está haciendo tiene sentido y que aparenta ser un curso de acción adecuado. Soy escritor y periodista. Se supone que debo comprender los temas más crípticos y explicárselos a la gente de tal manera que les resulten más claros. Algunas ideas de Viridian son profundas y útiles y otras son confusas y tontas, pero yo me empeño en difundirlas. Y sí, se difunden.


Axxón: Usted ha vivido en la India y ha estado en contacto con otras realidades, confiesa leer a escritores de ese país, de Turquía, europeos y participa en foros multinacionales. ¿Cuál es su visión, si tiene opinión formada, de lo que se intenta hacer en América Latina en materia de literatura especulativa? ¿Cree que es posible que alguna vez el mercado norteamericano, aunque sea en pequeña escala, se haga receptivo a lo que se escribe fuera de su área lingüística?

Bruce Sterling: Siempre es interesante ver cuáles son las obras que logran saltar la barrera de la traducción.

De la mayoría de los escritores extranjeros que conozco, los que parecen muy ansiosos por que los lean en EE.UU. no quieren hablarles a los lectores norteamericanos. No les interesa la sociedad norteamericana per se. En su mayor parte, solamente quieren entrar de alguna manera mágica en un mercado literario verdaderamente grande, global, en donde hay cierta posibilidad de que les paguen por su trabajo.

Esos escritores no se sientan y dicen "Hoy voy a escribir algo que un extranjero tendría que leer... algo que realmente les importe a esos extranjeros, algo que sea crucial para su bienestar". Si intentaran hacerlo, tendrían que "entender" a esos extranjeros calbalmente, leer sus libros, mirar sus películas, incluso hasta casarse con alguno de ellos. Hay muy pocos escritores con esa ambición. Quieren que el mundo repare en ellos y en lo maravilloso que hacen. No quieren perjudicar su ecuanimidad y enterarse de que el mundo está lleno de miles de millones de personas que no tienen ningún buen motivo para leerlos.

El mercado literario de América Latina tiene muchos problemas, incluso, con su "propia" zona lingüística; por ejemplo, es difícil encontrar escritores brasileros que estén seriamente interesados en los escritores mexicanos. Si hubiera un solo mercado literario Latinoamericano, un mercado unificado, ustedes estarían entre los escritores más ricos y más leídos del mundo. Comparados con los noruegos, los daneses o los checos, son una enorme zona lingüística.

La gente de todo el mundo mira culebrones brasileros y mexicanos. No los miran porque son brasileros o mexicanos. Nadie está corriendo de aquí para allá para tratar de hacer que los televidentes de todo el globo sean "más receptivos" con la TV mexicana. Todos miran TV mexicana porque allí hacen lo mismo que en todos los demás culebrones, pero lo hacen, de alguna manera, todavía más "aculebrado".


Axxón: Junto con el agradecimiento por haberse prestado a los requerimientos de Axxón le pedimos una reflexión final, sobre literatura, sociedad, universo, o lo que usted considere adecuado.

Bruce Sterling: Todos los días son un regalo.


Entrevista de "Equipo Axxón": Claudia De Bella, Eduardo J. Carletti y Sergio Gaut vel Hartman.

Ilustrado por Valeria Uccelli
Axxón 166 - septiembre de 2006

 
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