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ZAPPING 0108, 17-06-2002

Paisajes volcánicos de Venus

Grandes chorreaduras de lava

Las grandes chorreaduras o flujos de lava forman tres tipos de rasgos en Venus. El primer tipo es un gran flujo tipo inundación que forma campos llamados fluctus. El segundo tipo son los largos canales de lava. Y el tercero tipo son las grandes calderas que no tienen claros conos o escudos. Ninguno de estas tres rasgos es común en Venus, pero hay varios ejemplos importantes.

Grandes flujos

Se ha mapeado la posición de alrededor de 53 campos inundados de lava. Esos campos tienen entre 100 y 700 km de longitud, aunque el más grande tiene más de 1000 km. Sus anchos son variables y pueden alcanzar los 300 km. En tamaño son muy similares a los flujos de basaltos en la Tierra y a los mares más recientes de la Luna. La mayoría están ubicados en los bordes de las planicies bajas y fluyen a veces dentro de ellas. Unos pocos están ubicados cerca de grandes escudos recientes, pero la mayor parte están a cierta distancia de los más grandes volcanes de escudo. Se estima que estos flujos de lava se han producido poco después de que se formaron las planicies.

Canales de lava

Se han encontrado cerca de 200 canales en Venus. Muchos de ellos están en los campos de flujos de lava o en otros volcanes. Alrededor de 50 no están en los grandes campos de flujos de lava. Esos canales usualmente tienen entre 0,5 y 1,5 km de ancho, pero varían mucho en longitud. La mayoría tienen menos de 400 km de longitud, pero algunos tienen más de 700 km. Uno de ellos es más largo que cualquier otro que se haya encontrado en el Sistema Solar: alrededor de 6800 km. Este canal es aún más largo que el Río Nilo en la Tierra.

Como los campos de flujos de lava, la mayoría de los canales de lava comienzan cerca de los bordes de las planicies bajas. Muchos aparecen cerca de coronas o en grandes grupos. En general, los canales de lava de Venus tienen el aspecto de los sinuosos riachos de la Luna. El canal más largo no se parece tanto. En primer lugar tiende a ser más recto y ancho que los lunares. Segundo, muestra viejos brazos como los de los de los grandes ríos de la Tierra. Esto sugiere que algunos de estos canales pueden haberse formado a lo largo de mucho tiempo a partir de una o más erupciones.

Calderas

Los últimos rasgos que se muestran en el mapa indican sitios en los que se cree que han surgido grandes volúmenes de lava. Estas calderas son grandes, de forma redonda u oval, y tienen paredes abruptas en el interior y laderas suaves por fuera. Generalmente están rodeadas de anillos de fallas o grietas. Se piensa que las calderas se forman al derrumbarse el techo de una cámara de magma que se ha ido vaciando. Aunque la mayoría lo fueron, se han encontrado 86 calderas en Venus que no fueron parte de volcanes de escudo. La mayoría de estas calderas tienen entre 40 y 80 km de extensión, aunque la mayor tiene cerca de 200 km. La mayoría están cerca de los escudos de las regiones de Atla y Beta, pero hay algunos en las planicies altas de Lakshmi Planum. No se hallaron calderas en las planicies bajas, lo que sugiere que no se han formado cámaras de magma en ellas. Si esto es cierto, la lava debe haber subido derecho a la superficie en esos lugares, por lo cual ha tenido poca chance de acumularse e ir formando una caldera a lo largo del tiempo. Esto podría explicar tanto la formación de las planicies como el pequeño tamaño de los escudos de las tierras bajas. En las tierras altas, se encuentran tanto calderas como grandes escudos, lo que indicaría que allí sí se forman cámaras de magma.

Se piensa que esta diferencia en la actividad volcánica según la altura se debe a la presión atmosférica. En las tierras bajas es muy alta, cerca de 100 veces mayor que la de la Tierra. Por eso las lavas de las tierras bajas se parecen mucho a las del fondo del mar en la Tierra. Son muy densas y casi no contienen burbujas de gas. En las tierras altas, la presión atmosférica es menor, lo que permite que se formen burbujas de gas durante las erupciones. Esto hace que las rocas de las tierras altas sean menos densas, lo que permitirá que la lava se acumule debajo de la superficie. Si la lava se acumula en un lugar debajo de la superficie después de cada erupción, puede aparecer un gran escudo tiempo después. Sin embargo, si no se acumula suficiente lava no se producirá el volcán de escudo, pero puede crearse una caldera.