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Soñar no es asunto privado: Las apuestas del V Festival Internacional de Buenos Aires
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Sólo se trata de espiar. Se narraron historias y pensamientos íntimos, en base a subtítulos.
(Clarín) A través de la ventana se ve a un hombre y a una mujer sentados en silencio en el living de su casa. La tensión es perturbadora. Mirarlos,
irresistible. Una pequeña multitud se arrima al vidrio y observa sin disimulos. Y aún ve mucho más de lo que espera cuando los pensamientos de la pareja
aparecen proyectados en el mismo living. Así se descubre que esa es la última noche en que los protagonistas de la escena van a estar juntos. Y que vivieron un
amor, una mudanza al sur y una tragedia que los devolvió a Buenos Aires. Ahora enfrentan una separación inminente. Una chica alta y de rulos comenta.
Esa es la esencia de "La marea,
espacios interiores", una instalación del dramaturgo Mariano Pensotti que pudo verse durante el fin de semana (el domingo fue en el Pasaje Rivarola - Perón al
1300, del barrio de San Nicolás, Ciudad de Buenos Aires). El sábado, unas mil personas mayoritariamente jóvenes que no excedían los treinta años
recorrieron nueve situaciones, representadas por 16 actores en distintos sitios del pasaje. Y leyeron los pensamientos e historias de los personajes en un
subtitulado. La instalación, que se reactiva cada diez minutos tras los aplausos, integra la sección Proyecto Cruce del V Festival Internacional de Buenos Aires,
organizado por la Secretaría de Cultura porteña.
"La obra refleja lo que uno hace cuando está en un bar y se imagina la historia de alguien que está en otra mesa explica Pensotti. Pero en este caso, el
espectador cuenta con subtítulos que le dan información a la que no accedería con un simple vistazo".
Cerca de la esquina hay un accidente. Un hombre yace al lado de su moto, trata de levantarse pero está herido. Los curiosos no lo ayudan: están distraídos
leyendo que el accidentado es un actor de TV, que alguna vez fue famoso hasta que dejó todo y recorrió el país en su moto.
Simultáneamente, una pareja se besa por primera vez, ignorando que en un año ya se habrá separado. Un hombre y una mujer que se conocieron por un aviso
se desencuentran. Una chica con insomnio repasa antiguos amores. Y un padre que se escapa de la fiesta de 15 de su hija para fumar en el balcón recuerda su
adolescencia. Son cosas que pueden pasar en la vida de cualquiera, como en la de esa gente que anoche se atrevió a espiarlas.
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