Charles D. Keeling, profesor en el Instituto Oceanográfico Scripps de La Jolla, California, midió la cantidad de CO2 en la atmósfera desde 1948 hasta su muerte en el año 2005. Construyó un gráfico (las mediciones continúan) que muestra un crecimiento gradual y continuo del gas, pasando de 325 partes por millón a las 405 actuales
Las cifras sacaron el problema del calentamiento global del terreno de la especulación al de la ciencia. El gráfico de Keeling permite visualizar un hecho importante: existen oscilaciones anuales en las cantidades del gas en la atmósfera, con un incremento en el invierno y un descenso en el verano. La explicación está en que en el verano la vegetación en esplendor absorbe grandes cantidades del gas que luego revertirá en el invierno.
Este recambio es más notorio en el hemisferio Norte, por la extensión de tierra y la mayor cantidad de árboles que pierden sus hojas, es nulo en las zonas tropicales y ocurre con menor intensidad en el hemisferio Sur.