23/Jun/08

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Estoy orgulloso de que Hollywood vaya a rodar un remake de mi filme

Dice Nacho Vigalondo, director español de cine y nominado al Oscar por su corto 7:35 de la mañana

Nacho Vigalondo (Cabezón de la Sal, Cantabria, 1977) saltó a la palestra cuando su segundo cortometraje 7:35 de la mañana fue nominado a los Oscar en 2005. Ahora, estrena su primer largometraje, Los cronocrímenes, el 27 de junio en las salas comerciales de toda España tras su exitoso paso por el Festival de Sitges 2007 y el Festival de Sundance 2008.

La película, que entremezcla ciencia ficción, terror y acción, narra en clave de humor la historia de un hombre que viaja al pasado y se encuentra consigo mismo y con un siniestro individuo que intenta acabar con su vida. El filme ha contado con una avispada idea promocional a través de un juego interactivo en el que el usuario a medida que iba resolviendo acertijos obtenía premios reales como un viaje a Tenerife, donde se presentó oficialmente la cinta hace dos semanas, y el visionado exclusivo del filme en el espacio aéreo.

Hollywood rodará un remake de Los cronocrímenes, ya que los derechos han sido comprados por United Artists, la productora de Tom Cruise.

P- Su intención en un principio era rodar la película con un solo actor, en tiempo real y una sola localización. ¿Qué se torció?

NV- Llegó un momento en que era una estupidez pretender mantener esa exigencia hasta el final. Está bien plantearte retos formales, pero lo importante es que la película tenga un sentido dramático. Uno puede escribir un guión muy habilidoso, pero si no tiene carga dramática carece de ningún valor.

P- La peculiar campaña promocional del filme está generando una gran expectativa. ¿No teme que esto se pueda volver en contra de la propia película?

NV- No lo creo. El gran problema del cine español es la promoción. Corres más peligro al hacer una promoción insuficiente que haciendo una promoción equivocada. Fallar por exceso es un mal menor.

P- Para rodar Los cronocrímenes, ¿ha tenido como referentes películas como Los pasajeros del tiempo o El tiempo en sus manos, o series de televisión como En los límites de la realidad?

NV- Sí, es cierto que he tenido esos títulos en cuenta, pero las películas que he tenido más presente han sido Psicosis, de Alfred Hitchcock, y Los sobornados, de Fritz Lang.

P- ¿Se puede decir que Los cronocrímenes es cine de ciencia ficción de andar por casa?

NV- Sí, tranquilamente. Es cine de ciencia ficción al alcance de la mano. La película plantea un modelo de historia que no se había visto hasta ahora en otros filmes de viajes en el tiempo, ya que, además, incita al espectador a continuar con la trama. Por encima de agradar, Los cronocrímenes intenta retar al espectador. La buena ciencia ficción debe ser siempre una herramienta para llegar a otro punto, en este caso para enfrentar al personaje de Héctor consigo mismo en una trama en la que el actor Karra Elejalde se ve obligado a desdoblarse. Hay géneros como el drama y la comedia que se sustentan en formatos clásicos, pero en la ciencia ficción hay una constante renovación.

P- ¿Pensó en Karra Elejalde desde el primer momento para el papel protagónico?

NV- La verdad que cuando escribí el guión no tenía a ningún actor en la cabeza. Cuando se escribe el guión no sabes el alcance que va a tener la película ni el actor al que vas a tener acceso. Desde que surgió la propuesta de Karra no he podido pensar en otro actor para ser el protagonista.

P- Elejalde ha comentado que fue un rodaje accidentado y uno de los más duros que ha vivido. ¿Realmente ha sido así?

NV- Sí. Karra Elejalde ha hecho un gran sacrificio físico para interpretar su papel. Es una película muy física con muchos accidentes en plano. Es un filme casi de acción. Aunque sean pocos personajes y pocos elementos son escasas las secuencias que no incluyen una persecución o una ostia. Karra se pasa casi todo el largometraje corriendo. Teniendo en cuenta que padecía una hernia discal durante el rodaje, Karra se ha dejado la piel en el rodaje.

P- Philip K. Dick es uno de sus referentes. ¿Se atrevería a adaptar algunos de sus novelas de ciencia ficción?

NV- Me atrevería. Aunque creo que no es buena idea adaptar novelas a la pantalla grande. Es más oportuno empaparse de su espíritu y ser fiel a su estilo. Por ejemplo, Blade Runner es una adaptación libre de la novela, incluso en más de un sentido es casi opuesta al libro. Es un ejemplo de que Philip K. Dick no tiene por qué ser interpretado literalmente y que puede dar pie a grandes películas.

P- En Hollywood van a rodar una nueva versión de Los cronocrímenes. Hace poco filmaron un remake de Rec. ¿Hay falta de ideas en la meca del cine?

NV- No creo que haya falta de ideas. Pienso que no ha existido un momento histórico en el que no haya habido ideas. Las ideas están siempre ahí. Lo que pasa es que, a veces, fallan los mecanismos por las que esas ideas llegan a convertirse en películas. Resulta más seguro apostar por una idea que ya ha sido llevada a la pantalla y se prefiere no partir de cero. En cualquier caso estoy muy orgulloso de que Hollywood vaya a filmar una nueva versión de mí película.

P- ¿Teme que el remake de Hollywood sea mejor que su propia película?

NV- Es una sensación ambigua. Por un lado, lo temes. Por otro lado, te apetece.

P- ¿Se ve rodando en el extranjero?

NV- Por supuesto. Incluso, a veces, me resulta más fácil verme rodando en el extranjero que en España porque mi historia como director en España siempre ha sido una batalla contra los elementos. Sin embargo, en Hollywood siempre me han tendido la mano, nominándome al Oscar o enviándome guiones. Ya se verá.

P- ¿Están cambiando las nuevas tecnologías el formato narrativo?

NV- A los formatos narrativos les sienta bien una renovación. Las claves del futuro radican en el que el cine tenga la inmediatez y la agilidad de la escritura. Están aumentando las posibilidades factibles. Se están eliminando barreras como las de la duración exigible para distribuir una película. Y quizá se estén derrumbando algunos prejuicios del espectador.

Fuente: El Día. Aportado por Graciela Lorenzo Tillard