Con consideraciones más realistas y por medio de una simulación computacional de alta fidelidad, los científicos han logrado establecer que las masas de estos colosos relativistas no han sido bien establecidas
El método actual para medir las masas de los agujeros negros centrales de galaxias es la observación de las velocidades orbitales de estrellas que circundan al centro, para luego deducir la masa necesaria para explicar estas velocidades. La masa que se obtiene mediante este cálculo se atribuye por completo a una componente oscura en el centro mismo de la galaxia, que corresponde al agujero negro.
Si bien los astrónomos saben de la existencia de halos esféricos de materia oscura que envuelven a las galaxias, hasta ahora se habían despreciado, indicándose que la masa del halo era muy pequeña como para afectar demasiado a las velocidades de las estrellas que rodean al agujero negro galáctico.
A primera vista la suposición anterior podría parecer inofensiva, pero un reciente estudio indica que es una grave falencia a la hora de estimar masas. Esto es según el científico Karl Gebhardt de la University of Texas, y sus colegas, quiénes encontraron que es muy necesario considerar el efecto del halo galáctico para estimar las masas de los agujeros negros.
Ellos hicieron una simulación computacional en un supercomputador de la galaxia M87. Ésta es de tipo gigante y se encuentra a 50 millones de años luz de la Tierra. Lo diferente que hicieron los investigadores en esta simulación es, precisamente, considerar la presencia del halo de materia oscura, lo que arrojó un resultado totalmente inesperado.
La simulación mostró que la masa del agujero negro de M87 es de 6.400 masas solares, lo cual es mayor a lo estimado previamente por un factor de 3. Es decir, los movimientos estelares en torno a los agujeros negros centrales no son producto solamente de la influencia del mismo agujero, sino que también en parte son afectados por el halo.
Gebhardt indica que los errores que se pudieron haber cometido en la medición de masas de otros agujeros negros galácticos podrían variar fácilmente entre 1,5 y 3. Junto con este estrepitoso resultado, el investigador hace un llamado a los astrónomos a reconsiderar su visión acerca de la mecánica de la formación de galaxias en torno a agujeros negros, debido a que sistemáticamente y sin querer estuvieron subestimando las masas de estos gigantes negros.
Fuente: Red Astro. Aportado por Eduardo J. Carletti
Más información:
- Agujero negro supermasivo resulta arrojado fuera de su galaxia
- Habría relación entre la masa de los agujeros negros de una galaxia y su número de cúmulos globulares
- Cómo nacieron los primeros agujeros negros supermasivos
- Mega-agujero negro: dos veces más grande de lo que se pensaba
- Vientos de cambios: cómo los agujeros negros pueden dar forma a las galaxias
- El rol de los agujeros negros primitivos
- Los primeros agujeros negros se podrían haber incubado en capullos gigantes parecidos a estrellas
- Hallan un nuevo tipo de agujero negro, del tamaño de 500 soles