SpaceShipTwo es un inusual artefacto volador con capacidad para seis pasajeros y dos pilotos, y ha sido diseñado para realizar vuelos suborbitales, hasta algo más de 100 kilómetros de altura, con seis turistas a bordo que estén dispuestos a pagar 134.000 euros cada uno por la experiencia de 45 minutos
Puede llegar a ser la primera nave espacial privada de pasajeros y ha sido presentada ahora en el Mojave Air and Space Port , en California (EEUU). El promotor del vehículo, Virgin Galactic, está convencido de que con esta nave pionera abrirá una nueva faceta de la explotación comercial del espacio. Aunque todavía no se ha fijado una fecha para empezar a comercializar el SpaceShipTwo, Virgin Galactic afirma que será a partir de 2011, una vez concluidas las numerosas pruebas y vuelos de ensayo que hay que realizar antes. Más de 200 personas, incluido un puñado de españoles, ha reservado ya plaza. El diseño y construcción de la nave es de la empresa Scaled Composites.
En la ceremonia de presentación, el pasado lunes, ante 800 personas, el SpaceShipTwo fue rebautizado Virgin Space Ship Enterprise por el gobernador de California Arnold Schwarzenegger, invitado de honor a la misma. El nombre Enterprise recién adquirido apunta claramente a un homenaje a la literaria nave de Star Trek.
El nuevo vehículo, el avión que más materiales compuestos de carbono incorpora en su estructura, según sus fabricantes, es heredero directo -y el doble de grande- del SpaceShipOne, que ganó en 2004 el premio Ansari X (dotado con 10 millones de dólares) al realizar dos vuelos pilotados suborbitales (a más de 100 kilómetros de altura). Ambos son producto del entusiasmo de un apasionado de la aviación y del espacio, Burt Rutan, que ha unido fuerzas con el multimillonario británico Richard Branson y su Virgin Galactic.
El SpaceShipTwo, de 18 metros de longitud, no despegará por si mismo desde tierra sino que lo hará sujeta a una nave nodriza, la WhiteKnightTwo, que ya fue presentada el año pasado, y que lo elevará hasta 15 kilometros de altura. Ahí empezará la nave de pasajeros su vuelo en solitario propulsada por sus propios motores. Alcanzará los 110 kilómetros de altura (la Estación Espacial Internacional está a unos 400 y los satélites de telecomunicaciones a 36.000 kilómetros). A esa altura máxima de vuelo suborbital los seis pasajeros experimentarán unos minutos de ausencia de gravedad y emprenderán el regreso a la Tierra. En total serán 45 minutos. Eso si, la nave llevará buenas ventanas para disfrutar de las vistas.
«Quiero decir, que este programa ha sido, hasta ahora, más duro de lo que pensábamos que iba a ser, está llevando más tiempo y es más difícil», comentó Rutan en la presentación. «Es un hito tremendo lo que hacemos hoy al desvelar la primera nave espacial tripulada comercial. Estoy deseando empezar el programa de ensayos», añadió, según informa Space.com.
En España hay 12 personas que ya están en lista de espera para volar en este nuevo artefacto, según afirma la agencia de viajes Bru&Bru que los comercializa.
Fuente: El País. Aportado por Eduardo J. Carletti