La nave espacial Cassini ha superado el lunes 2 de noviembre su sobrevuelo sobre la luna Encélado de Saturno, se ha mantenido en buen estado y ha estado enviando imágenes y datos de este encuentro a la Tierra
Cassini se ha acercado más a Encélado en otras ocasiones, pero este paso ha llevado a la nave a su zambullida más profunda hacia el corazón del penacho que es expulsado desde la región del polo sur. Los científicos están ansiosos por tamizar los resultados.
En la imagen sin procesar, la luz del sol ilumina una curva de creciente a lo largo del borde de Encélado (arriba a la izquierda) y destaca el brumoso penacho de la luna. La imagen fue capturada por la cámara de ángulo estrecho de la Cassini cuando la nave espacial pasó a alrededor de 190.000 kilómetros sobre la luna.
Otra imagen en bruto (abajo) parece mostrar chorros separados que salen de la luna. Esta imagen fue tomada a aproximadamente 330.000 kilómetros de distancia.
En su punto más próximo el 2 de noviembre, Cassini voló a unos 100 kilómetros por encima de la superficie de Encélado.
Desde el descubrimiento de esta pluma en 2005, los científicos se han cautivado con los enigmáticos chorros. Los sobrevuelos anteriores detectaron vapor de agua, sodio y moléculas orgánicas, pero los científicos quiern saber más acerca de la composición de la pluma y la densidad para caracterizar la fuente, posiblemente un océano líquido bajo la superficie helada de la luna. Esto también ayudaría a determinar si Encélado tiene las condiciones necesarias para la vida.
Los directores de la misión hicieron extensos estudios para asegurarse de que la nave podía volar de forma segura a través de las plumas, sin utilizar una cantidad excesiva de combustible.
Fuente: JPL. Aportado por Eduardo J. Carletti