¿Qué pasaría si los humanos pudiesen crear —intencionalmente— un agujero negro? Bueno, para empezar podríamos encontrar la fuente de energía final para crear el más avanzado motor de una nave espacial, una potencial unidad de impulsión alimentada por un agujero negro para propulsar las naves estelares
Resulta qie los agujeros negros no son del todo negros; ya que que emiten la «radiación de Hawking», que les hace perder la energía (y por lo tanto masa) a lo largo del tiempo. En los grandes agujeros negros, la cantidad de radiación producida es minúscula, pero los agujeros negros muy pequeños pueden convertir rápidamete su masa en una cantidad enorme de energía.
Este hecho llevó a Lois Crane y Shawn Westmoreland, de Kansas State University, a calcular qué se necesita para crear un pequeño agujero negro y aprovechar la energía para propulsar una nave espacial. Encontraron que hay un «punto caramelo» para los agujeros negros, cuando son lo suficientemente pequeños para que se los pueda crear artificialmente y producir enormes cantidades de energía, pero lo suficientemente grandes como para que no se evaporen de inmediato en estallido de partículas. Su agujero negro ideal tendría una masa de alrededor de un millón de toneladas métricas y alrededor de una milésima del tamaño de un protón.
Para crear un agujero negro, Crane y Westmoreland imaginan un maisvo láser esférico de rayos gamma en el espacio, alimentado por miles de kilómetros cuadrados de paneles solares. Después de haberse cargado durante unos años, este láser liberaría su energía acumulada, equivalente a un millón de toneladas métricas de masa, en una envoltura esférica de fotones convergentes. Cuando la envoltura colapsa sobre sí misma, la energía se vuelve tan densa que su propia gravedad se enfoca en un solo punto y nace un agujero negro.
De inmediato, el agujero negro comenzará a vomitar toda la energía que se comprimió para formarlo. Para aprovechar esa energía y propulsar una nave espacial, el agujero negro se podría colocar en el centro de un espejo parabólico de gas de electrones que refleje toda la energía irradiada por el agujero negro hacia la parte trasera de la nave, impulsando la nave hacia adelante. Haces de partículas unidos a la nave tras el agujero negro se usarían para alimentar al mismo tiempo el agujero negro e impulsarlo junto con la nave.
Una unidad de impulso de agujero negro fácilmente podría acelerar a cerca de la velocidad de la luz, abriendoel cosmos a los viajeros humanos, pero eso es sólo el principio. El micro-agujero negro también se podría utilizar como generador capaz de transformar cualquier materia directamente en energía. Esta energía se podría utilizar para crear nuevos agujeros negros y nuevos generadores de energía. Obviamente, crear y aprovechar el agujero negro no es una empresa fácil, pero Crane y Westmoreland señalan que el impulsor de agujero negro tiene una ventaja significativa sobre otras tecnologías más especulativas, como los impulsores warp (que retorcerían el espacio) y los agujeros de gusano: es físicamente posible. A su juicio, merece la pena seguir investigando «ya que permite a un destino completamente diferente y mucho más amplio para la raza humana. No debemos subestimar el ingenio de los ingenieros del futuro».
Fuente: Universe Today. Aportado por Eduardo J. Carletti