Se trata de una obra de teatro de ciencia-ficción distópica
Fahrenheit 56K es una obra de teatro. Es una distopía (como 1984 de George Orwell, Fahrenheit 451 de Ray Bradbury o Mundo Feliz de Aldous Huxley) cuyos principales temas son la censura, la libertad de expresión e Internet.
Farenheit 56K
Autor: Fernando de Querol Alcaraz
Editorial Bubok
Categoría: Artes
Subcategoría: Teatro
N° de páginas: 136
Tamaño: 150×210
ISBN: 978-84-9916-155-6
Interior: Blanco y negro
Maquetación: Pegado
Esta distopía nos presenta un Estado dictatorial donde el Partido pretende dominar el conocimiento humano y quiere imponer sus doctrinas por la fuerza. Además, el Partido falsifica la Historia y nunca reconoce haberse equivocado ni haber rectificado. En esta sociedad, sin embargo, existe Internet. El negar una doctrina del Partido en un asunto que éste considera de importancia se castiga con prisión. El Partido también recurre al insulto y a la propaganda. El Partido considera la democracia como un régimen mediocre y ridículo y desprecia la libertad de expresión. El Partido comete muchos fraudes y procura desacreditar los rumores por medio de propaganda.
La relación entre Internet y la libertad de expresión es uno de los principales temas de Fahrenheit 56K. Internet se presenta como una gran oportunidad para la libertad de expresión. En Fahrenheit 56K, a través de diversas conversaciones entre los personajes, se exponen las características de dicha sociedad y se tratan temas como la censura, la libertad de expresión, el dogmatismo, el racionalismo, la democracia, la intolerancia, la libertad religiosa, Internet y la argumentación racional. Frente al dogmatismo del Partido, se resalta la importancia de la argumentación racional para conocer y defender la verdad y la gran importancia de Internet para la libertad de expresión.
Los diversos personajes interactúan en esta sociedad. El Inquisidor es un dirigente importante del Estado que apoya los métodos y doctrinas del Partido, y, al igual que éste, desprecia la libertad de expresión, la democracia y considera que imponer por la fuerza una doctrina es lo adecuado. Frente a esto, hay dos hombres íntegros y tolerantes: El Maestro y El Hereje. Aún sin estar de acuerdo en una doctrina, ambos se respetan, son partidarios de la libertad de expresión y piensan que la verdad debe defenderse por la argumentación racional y no por el dogmatismo. El Maestro está preparando un libro refutando los argumentos de El Hereje y, al contrario que el Partido, está en contra del dogmatismo y la persecución de los que discrepan. En Fahrenheit 56K hay elementos de carácter simbólico, de sátira, de parodia y de crítica del dogmatismo, sea de carácter religioso, político, científico, etc.
Fuente: Aportado por Eduardo J. Carletti