Con un submarino que se adapta al cuerpo humano como el traje de Iron Man se planea rescatar una de las computadoras más arcaicas de la historia: el mecanismo de Antikythera, de más de 2.000 años de antigüedad
El traje submarino robótico más avanzado del mundo está listo para ayudar a completar esta complicada tarea. Se espera que este sistema «vestible» permita a los operadores trabajar de forma segura en profundidades de hasta 300 metros bajo el nivel del mar, donde naufragó un antiguo barco romano frente a la isla griega de Antikythera en el Mar Egeo, isla que da nombre al dispositivo.
Este antiguo artefacto es una calculadora mecánica de bronce que fue diseñada con el objetivo de prever la posición del Sol y la Luna, y predecir los eclipses. Hace un siglo se halló la primera unidad, y ahora esperan encontrar otra más, tarea en la que este traje submarino será de gran utilidad debido a las complicadas condiciones.
En un principio, el traje submarino, conocido como Exosuit, fue diseñado para facilitar los accesos al interior de las plantas de tratamiento de agua de Nueva York, pero en esta ocasión, como vemos, su objetivo será totalmente diferente.
El Exosuit está fabricado en una aleación de aluminio con varios puntos de articulación que permitirán a los buceadores mover sus brazos y piernas con total libertad. La presión en el interior del traje no es diferente a la del interior de un submarino, o a la de la superficie terrestre al aire libre, por lo que podrías ponerte el traje, pasar 5 horas en el fondo del mar, y volver a la superficie sin ningún inconveniente.
Un cable umbilical directamente conectado al barco proporciona la energía suficiente para hacer funcionar los propulsores horizontales y verticales que dispone para moverse una vez se ha sumergido. Este cable también se encarga de transmitir voz, video, y demás datos, por lo que permite que la situación esté controlada en todo momento.
Además, el Exosuit cuenta con un complejo sistema que elimina el dióxido de carbono del aire exhalado, lo que permite hasta cincuenta horas de funcionamiento.
Por si todos los sistemas anteriores fallasen, cuenta con una batería de seguridad que le permitiría seguir en funcionamiento hasta ser rescatado.
Sin duda se trata de un invento que podría facilitar mucho no solo esta, sino innumerables tareas similares en las que las profundidades y complicadas condiciones impidieron hasta ahora el acceso de humanos. Aún así, no se trata de un traje apto para todos los bolsillos, ya que vestir este submarino cuesta 1,5 millones de dólares.
Fuente: New Scientist y wwwhatsnew. Aportado por Eduardo J. Carletti