"Los límites de la vida orgánica": la NASA a la búsqueda de vida extraña, no basada en el carbono

El anuncio de la NASA la semana pasada del descubrimiento de una posible vida en base al arsénico en el Lago Mono encaja con la estrategia de la NASA de ampliar la búsqueda de vida fuera de la Tierra a una vida extrema no basada en el carbono

Ningún descubrimiento que podamos hacer en nuestra exploración del Sistema Solar podría tener mayor impacto en el punto de vista que tenemos sobre nuestra posición en el cosmos, o ser más inspirador, que el descubrimiento de una forma de vida extraterrestre, aunque sea microbiana y primitiva. El descubrimiento en la última década de formas de vida extrema que prosperan en la Tierra en las paredes recalentadas de los respiraderos volcánicos en el fondo del mar y en regiones del interior de la corteza del planeta, llevó a un seminal informe en el 2009, The Limits of Organic Life in Planetary Systems («Los límites de la Vida Orgánica en los Sistemas Planetarios»), realizado por el National Research Council (NRC, en español Consejo de Investigación Nacional). El informe patrocinado por la NASA recomendó que la búsqueda más allá de la Tierra, en el Sistema Solar, se debe ampliar por el universo para incluir la posibilidad de vida «extraña».

«Nada», concluye el informe, «sería más trágico en la exploración norteamericana del espacio que encontrar vida extraterrestre y no reconocerla.»

La Tierra no acumuló oxígeno durante los primeros de 3.000 millones de años, aproximadamente, y no formó una capa de ozono hasta hace alrededor de 1.500 millones de años. Hay un énfasis considerable en la búsqueda de atmósferas del tipo terrestre en la actualidad, con oxígeno y una capa de ozono, pero, marca el reporte, también deberíamos utilizar modelos con diferentes ecosistemas microbianos no carbónicos y anaerobios, atmósferas que pueden tener paralelo con las diferentes etapas en la evolución de las atmósferas terrestres durante más de 4.000 millones de años, y las condiciones que pudiesen indicar la presencia de un planeta tectónicamente activo.

El informe señalaba que la exploración de los planetas se concentra en la búsqueda de lugares donde existe agua líquida, en conexión con la idea de dónde se encuentra la vida en la Tierra. Sin embargo, destacan que los líquidos como el amoniaco, metano y formamida también podrían ser bloques de construcción para la vida.

La luna de Saturno Titán es un candidato perfecto: el descubrimiento de evidencia de agua líquida y amoniaco en Titán proporciona el potencial para líquidos polares con vida, fuera de lo que suele considerarse como zona habitable. La estancia de la misión Cassini-Huygens en la superficie de Titán fue breve, por desgracia, pero Titán es el lugar más probable para mantener vida exótica, que podría ser descubierta usando dispositivos robóticos de teledetección.

Esperemos que algún día llegue el momento de la noticia de un hecho tan emocionante como el hallazgo de vida en otro planeta o luna.

Fuente: The Daily Galaxy. Aportado por Eduardo J. Carletti


Más información: