El municipio acoge una convención internacional con 300 participantes. Los actores Edward James Olmos y Mary McDonell pondrán el ‘glamour’ ‘made in Hollywood’
Llegó el día. Basauri (Vizcaya, España) viste hoy sus mejores galas para inaugurar su primera convención internacional sobre ciencia ficción. El evento, en el que van a participar más de 300 personas llegadas de todo el mundo, arranca a las diez de la mañana en el Social Antzokia, aunque no será hasta la tarde —18.30 horas— cuando celebre su inauguración oficial.
Entre los asistentes, dos invitados de excepción: los actores Edward James Olmos y Mary McDonell. Protagonistas de Battlestar Galactica —serie de culto para los amantes del género— pondrán el glamour ‘made in Hollywood’ a la cita y compartirán sus experiencias con sus fans durante tres maratonianas jornadas.
«De los mejores»
Además de acercar a Olmos y McDonell al público, ‘Basauri Con 1.0’ incluirá debates, conferencias, competiciones y la proyección de películas y series en la pantalla de cine. No faltará tampoco la música en directo, un concurso de disfraces, la grabación de un programa de radio, que se emitirá por Internet e incluso una charla sobre física nuclear, que impartirá un profesor de la universidad vasca. «Es un evento al nivel de los mejores. Ni en España ni en Europa se ha celebrado algo así durante los últimos años», anunciaba hace varias semanas Lourdes Arenillas, portavoz de ‘La 13ª Tribu’, asociación de aficionados a la ciencia ficción organizadora de la cita junto al Ayuntamiento.
Tras cerrar la venta de entradas por Internet el pasado miércoles —aún se pueden adquirir en establecimientos autorizados—, unas 200 personas participarán en las jornadas de apertura y clausura —viernes y domingo— y casi 300 el sábado. Los asistentes, que han ocupado todas las habitaciones del hotel Armiñe de Basauri y casi medio centenar en el Nervión de Bilbao, proceden de lugares tan lejanos como Estados Unidos, Canadá y Australia, aunque también se dejarán ver por la localidad un buen número de europeos.
El impacto económico aún está por determinar, aunque los organizadores de la convención han optado por ‘empujar’ a los asistentes hacia los establecimientos locales cerrando el teatro durante dos horas cada mediodía.
Fuente: El Correo. Aportado por Eduardo J. Carletti
Más información: