El canciller Jorge Taiana afirmó que el cuarto y más importante satélite que la Comisión Nacional de Actividades Espaciales le encargó a la empresa estatal rionegrina Invap para ser puesto en órbita por la NASA «es un verdadero orgullo argentino”. Fue al encabezar la presentación internacional del desarrollo en Bariloche
El ministro de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao, afirmó hoy que la misión SAC-D/Aquarius «constituye un proyecto emblemático para Argentina», al hablar en la presentación internacional del satélite en Bariloche.
Barañao destacó «el fuerte compromiso del poder político nacional en la ciencia y tecnología del país», que se vio reflejado con la visita de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a la planta de Invap, donde se construyó el satélite.
Por su parte, el canciller Jorge Taiana afirmó este mediodía que «el satélite SAC-D es un verdadero orgullo argentino”, al encabezar la presentación internacional del desarrollo en Bariloche.
«Estamos satisfechos porque alcanzamos un hito muy importante en el desarrollo del conocimiento argentino y la cooperación internacional de igual a igual”, expresó Taiana en la conferencia a la que asistieron otros ministros, embajadores y científicos nacionales y extranjeros.
Del acto de presentación del satélite SAC-D/Aquarius, fabricado en Bariloche y que será lanzado en los Estados Unidos a fines de 2010, participan también el ministros de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez , el secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Homero Bibiloni y la secretaria de Planeamiento y Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Ruth Ladenheim.
El SAC-D es el cuarto y más importante satélite que la Comisión Nacional de Actividades Espaciales le encargó a la empresa estatal rionegrina Invap, y como sucedió con los tres anteriores su puesta en órbita está a cargo de la NASA estadounidense.
El satélite constituye un observatorio espacial para el océano, el clima y el medio ambiente, para lo que cuenta con cámaras ópticas y térmicas, radiómetros de microondas y otros aparatos de avanzada.
También lleva instrumentos para estudios de la atmósfera y el espacio, como el monitoreo de desechos espaciales, y sistemas de colección de datos.
La misión se denomina SAC-D/Aquarius, debido al más importante de los instrumentos que lleva a bordo, el Aquarius de la NASA, valuado en 200 millones de dólares, considerado como muy importante para estudiar el cambio climático global a través de la salinidad de los mares.
El SAC-D (Satélite de Aplicaciones Científicas-D) será transportado en septiembre a Brasil, para los ensayos ambientales (condiciones que encontrará en su misión) en el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciais (INPE), de Brasil.
Luego viajará a Estados Unidos para el lanzamiento desde la base de Vanderberg, de la Fuerza Aérea norteamericana en California. Irá al espacio con el cohete Delta II, el mismo que puso en órbita al SAC-C hace nueve años.
Además de Brasil y Estados Unidos, esta misión cuenta con acuerdos de cooperación con la Agenzia Spaziale Italiana (ASI), el Centre National dïEtudes Spatiales (CNES) de Francia, y la Canadian Space Agency (CSA) de Canadá, países que aportaron otros siete instrumentos.
Hasta el SAC-D/Aquarius la salinidad marina sólo se conocía mediante mediciones realizadas en forma parcial, a través de embarcaciones y boyas, por lo que el satélite implica un aporte sin precedentes para estudios climáticos.
También proveerá datos sobre la humedad del suelo en grandes extensiones, de gran valor para la generación de alertas tempranas de inundaciones, y aportará información sobre enfermedades como la malaria, hantavirus, dengue y chagas.
La operación y recepción de información del SAC-D en el espacio será realizada por la CONAE desde su base de Falda del Carmen, en Córdoba.
Algunos números del SAC-D: pesa 1.400 kilos; tiene 2,7 metros de diámetro; 7 metros de largo, con la antena del Aquarius desplegada; 1.443 watts de potencia; orbitará a 657 kilómetros de altura; y dará 14 vueltas alrededor de la Tierra por día.
Pasará por el Ecuador entre las 6 y las 18 horas, y se tomará siete días hasta una revisita (hasta que vuelve a pasar por el mismo lugar). Su vida útil estimada es de cinco años como mínimo.
Fuente: Telam. Aportado por Eduardo J. Carletti
Más información:
Más información:
- Hace 48 años se lanzaba el primer satélite artificial, el Sputnik 1
- El satélite argentino SAC-C cumple cuatro años de tarea impecable en el espacio
- Preparan un satélite argentino que detectará emergencias climáticas
- Un nuevo satélite argentino de observación: SAC-D
- Lanzan un satélite argentino-italiano para cuidar el planeta