Un nuevo modelo de generador de energía eólica, menos intrusivo para el ecosistema, fue presentado en Italia
España cuenta con 16.700 megavatios de origen eólico conectados a la red eléctrica, lo que supone más de 700 parques, según los datos de la Asociación Empresarial Eólica (AEE). Actualmente es la tercera nación mundial en la producción de este tipo de energía, detrás de EEUU y Alemania.
La energía eólica es una de las más limpias que conocemos, pero lleva consigo algunos problemas debido a la intrusión en la naturaleza de los aerogeneradores. Por este motivo la instalación de nuevas turbinas ha dividido desde siempre ecologistas, paisajistas y empresarios.
Tornado Like, primer ejemplo de turbina eólica sin palas, es un proyecto italiano basado en un nuevo concepto de extracción energética que promete reducir significativamente el impacto ambiental, revitalizando la esperanza en un uso masivo de este tipo de energía.
Hay fundamentalmente tres tipos de problemas: el impacto visual o paisajístico, las emisiones de ruido acústico, y sobre todo, el riesgo para la avifauna, «hacia al cual el WWF es muy sensible», asegura Massimiliano Varriale, responsable técnico del sector Energía y Residuos de WWF Italia.
La falta de aspas de este prototipo, su sugestiva forma cónica y las dimensiones reducidas (solo tres metros de altura frente a los 70 metros de las actuales turbinas), permitirán una perfecta integración entre naturaleza y tecnología, ofreciendo además una solución a la mortandad de las aves.
El aire entra en el dispositivo y genera un vórtice interior, creando una nueva clase de corrientes continuas (también en ausencia de viento). Será suficiente una velocidad de viento de tres o cuatro metros por segundo para asegurar una potencia de 100/200 vatios. Con viento mas fuerte podrá llegar a la misma potencia de un aerogenerador tradicional.
El proyecto llevado a cabo por Western Co, sociedad italiana de San Benedetto del Tronto, especializada en energías renovables, nace desde el desarrollo de los estudios sobre la energía cinética de la Russian House for International Scientific & technological Cooperation.
«Queremos crear generadores de energía que concilien el desarrollo de la humanidad con el respeto al medioambiente», afirma el presidente de la compañía, Giovanni Cimini.
El primer parque eólico experimental será construido en el Parque de los Montes Sibilinos y cuenta con el apoyo del partido Verdes de Toscana. La compañía italiana subraya que todavía el dispositivo no se encuentra en el mercado aunque prevé iniciar su producción durante el segundo semestre de 2010.
Proyectos similares
La División de Energías Renovables del CIEMAT (Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas) asegura que existen referencias a dispositivos similares, conocidos como torres ciclónicas, en publicaciones científicas.
«En España, un ingeniero llamado José Valentin Zapata desarrolló una torre ciclónica e intentó instalar dicho sistema en los años 80 en la provincia de Toledo sin éxito», indican Ignacio Cruz y Enrique Soria del CIEMAT.
«No tenemos constancia de que se haya realizado ningún dispositivo de este tipo», agregan escépticos Cruz y Soria, los cuales afirman tener dudas teoricas sobre la realización de esta aplicación.
El responsable tecnico del sector Energía y Residuos de WWF Italia se muestra más optimista al afirmar que «si Tornado Like cumple con las expectativas, permitirá reducir algunos de los impactos ambientales más importantes relacionados con este tipo de energía».
«No existe alguna interferencia humana que tenga impacto cero, así como no existe ninguna forma de extraer energía que no comporte algunos problemas. Por esto WWF apoyará siempre el desarrollo tecnológico y la creación de maquinas que intenten reducir el impacto ambiental, para una mejor convivencia entre la humanidad y la naturaleza», agrega Varriale.
Impacto ambiental sobre la avifauna
Según el ornitólogo Miguel Ferrer, presidente de la Fundación Migres y científico de Estación Biológica de Doñana (CSIC), hoy en día se pueden tomar muchas medidas para proteger la avifauna.
La Fundación tiene por objeto poner en valor el fenómeno de la migración de aves, cetáceos y tortugas en el Estrecho de Gibraltar así como desarrollar y fomentar actividades orientadas al desarrollo sostenible
Las aves, como los seres humanos, disfrutan del viento para moverse ahorrando energía y tiempo. El riesgo de mortandad nace cuando las instalaciones eólicas coinciden con las rutas de migración. De hecho, las administraciones autonómicas son muy exigentes a la hora de conceder las autorizaciones administrativas para la instalación de nuevas turbinas.
«El problema es que no nos damos cuenta de todas las consecuencias de algunas tecnologías hasta cuando no introducimos una nueva variable, por esto es necesario revisar continuamente nuestros estudios», afirma Ferrer.
Según el ornitólogo es importante diseñar y apoyar nuevos sistemas tecnológicos como Tornado Like; por otro lado «tenemos que intervenir en los parques eólicos ya existentes, aplicando medidas de protección ambiental».
«Hemos descubierto, por ejemplo, que en cada parque eólico existen algunos aerogeneradores más peligrosos que otros para las aves. Estamos hablando efectivamente de dispositivos que coinciden con la ruta migratoria», explica el científico.
Elaborando los datos, la Fundación Migres puede dibujar un mapa constantemente actualizado de estas corrientes y tomar medidas de prevención sobre las instalaciones existentes: «apagando solo los aerogeneradores peligrosos y teniendo en función los demás».
Ferrer subraya que no hay que estar en contra de este tipo de energía a pesar de sus impactos ambientales, sino que «tenemos que trabajar continuamente para reducir los riesgos», porque «las energías renovables son el futuro y es cierto que no podemos dejarlas en favor de las plantas termicas de carbón».
Fuente: El Mundo. Aportado por Matías Buonfrate
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