Estudian extraño animal, un "cactus" andante que se movía en China hace 500 millones de años

En China ha aparecido el fósil de un ‘cactus andante’, un ser de hace más de 500 millones de años que podría ayudar a los científicos a comprender mejor la evolución de los artrópodos, como los insectos, los crustáceos y las arañas

La curiosa criatura se llama en realidad Diania cactiformis y ha aparecido en la provincia china de Yunnan, al sur del país.

Un grupo de investigadores liderados por Jianni Liul han publican el descubrimiento de su fósil en la revista Nature de esta semana y ponen una pieza más en el rompecabezas que trata de descifrar qué hicieron primero los artrópodos: ¿endurecieron sus miembros o su cuerpo?

Los artrópodos se caracterizan precisamente por tener esqueleto externo, o exoesqueleto, y el ‘cactus andante’ indica que esta cualidad pudo empezar por desarrollar patas más robustas.

Como un gusano con 20 patas

El ‘cactus andante’ mide seis centímetros de largo, es una criatura alargada, delgada, que recuerda a un gusano, y que tiene 10 apéndices a cada lado del cuerpo. Esas ‘patas’ —que evocan los pinchos de los cactus— son puntudas, robustas, y seguramente también eran articuladas.

El ‘cactus andante’ es una especie desconocida de lobopodio y sus descubridores creen que este organismo podría tener alguna relación con los artrópodos modernos, porque el nuevo fósil es el lobopodio cuyos miembros son más parecidos a los de aquellos animales.

Diania es un género animal actualmente extinguido, cuyos fósiles se han encontrado en la formación Esquistos de Maotianshan, del Cámbrico Inferior de China, representado por una única especie Diania cactiformis. Por sus particularidades, se ha dado a conocer como cactus andante. Este peculiar organismo pertenece a un taxón llamado Lobopodia y a diferencia de estos, que son blandos, está acorazado por un exoesqueleto rígido. Tiene cuerpo vermiforme con 10 pares de patas espinosas, robustas y aparentemente articuladas. Las patas articuladas son un carácter diferencial de los artrópodos, por lo que Diania podría ocupar una posición evolutiva clave en el origen del grupo animal más diverso de la Tierra.

El nombre Diania procede de Dian, una abreviación en idioma chino de Yunnan, que es la provincia donde se descubrieron los fósiles. En cuanto al nombre específico, cactiformis, significa que tiene forma de cactus, debido a la presencia de abundantes espinas uniformemente distribuidas. A este aspecto de cactus se debe el nombre vulgar de «cactus andante» que le dieron sus descubridores para referirse a él de modo informal.

Los fósiles completos de D. cactiformis miden unos 6 cm de largo y tienen un cuerpo largo y delgado. En la parte anterior tienen una probóscide, presumiblemente utilizada para la alimentación. Tienen diez pares de patas, muy robustas y espinosas en comparación con el cuerpo. La característica más destacable es que las patas parecen estar articuladas. Tiene un exoesqueleto rígido dividido en segmentos en forma de anillo.

Diania se encuadra dentro de Lobopodia, un taxón extinto del Reino Animal. Se asume que tienen relación con los artrópodos, e incluso que estos pudieron descender de los lobópodos. Sin embargo, todos los lobópodos descubiertos antes de Diania tenían patas blandas, no segmentadas. Lo más significativo de Diania es que se trata de un lobópodo que parece haber alcanzado el rasgo más característico de los artrópodos, al que deben su nombre: las patas articuladas.

Al describir la especie, los autores sugirieron que Diania podría ser un taxón hermano de Schinderhannes y el resto de artrópodos, pero se consideró la posibilidad de que pueda tratarse de una forma más primitiva aparecida antes de criaturas como Kerygmachela o Anomalocaris.

Diania cactiforme también hace pensar que la artropodización (es decir, la apariencia segmentos anulares articulados cubriendo las patas), se desarrolló antes de artrodización (es decir, segmentos duros en forma de anillo alrededor del cuerpo).

Los lobopodios (Lobopodia) son un grupo de animales poco conocidos, que corresponden principalmente a taxones relacionados con los artrópodos. Su registro fósil se remonta al Cámbrico. Los lobopodios están segmentados y las patas suelen llevar uñas en sus extremos.

El más antiguo fósil casi completo hasta la fecha de estos animales corresponde al Cámbrico inferior, y algunos también se conocen desde el Silúrico. Poseen numerosas piernas, o si carecen de ellas, lobulos laterales como en los dinocaridos.Tienen numerosas placas blindadas, que a menudo cubren todo el cuerpo y la cabeza. Ya que esto disminuye su flexibilidad, en ocasiones poseen espinas, estas probablemente juegan un un papel en la defensa contra los depredadores. El grupo considera formas del Cámbrico, además de los existentes onicoforos.

Fuente: Varios sitios. Aportado por Eduardo J. Carletti


Más información: