Planteada ya en 1997 en la revista Wired, luego en el 2008 por Jim McLane, ex de la NASA, la idea retorna
Por la oportunidad de ver salir el sol sobre el Monte Olimpo, o tal vez dar un paseo por las vastas llanuras de Vastitas Borealis, o pasear por las extensas dunas del cráter Jojutla, ¿se anotaría en un vuelo únicamente de ida a Marte?
Es una pregunta a la que han respondido positivamente los científicos Dirk Schulze-Makuch, de la universidad del Estado de Washington, y Paul Davies, físico y cosmólogo de la Universidad Estatal de Arizona, quienes abogan por una misión tripulada a Marte en un artículo titulado «Yendo con valentía: una misión unidireccional humana a Marte».
En el artículo aseguran que aunque es técnicamente posible, una misión tripulada a Marte de ida y vuelta es poco probable que se realice muy pronto, en gran parte porque es una propuesta muy costosa, tanto en términos de recursos financieros como en voluntad política.
La mayor parte del gasto se destinaría a seguridad de la tripulación y el regreso de la nave a la Tierra, por lo que una misión tripulada en un viaje únicamente de ida, no sólo reduciría los costos, sino que también marcaría el comienzo de la colonización humana a largo plazo del Planeta Rojo.
Marte es, con mucho, el mundo más prometedor para la colonización y el desarrollo sostenido, concluyen ambos científicos, ya que es similar en muchos aspectos a la Tierra y, sobre todo, posee una superficie de gravedad moderada, un clima aceptable, agua y dióxido de carbono, junto con una gama de minerales esenciales.Es para la Tierra el segundo más cercano vecino planetario (después de Venus), además de que un viaje a Marte dura unos seis meses con la opción de lanzamientos más favorables con la tecnología de los actuales cohetes químicos.
«Prevemos que la exploración de Marte debería comenzar y continuar durante mucho tiempo sobre la base de un viaje de ida solamente», señaló Schulze-Makuch.
«Una estrategia podría ser la de enviar cuatro astronautas inicialmente, distribuidos en dos naves espaciales, cada una con un módulo de aterrizaje y suministros suficientes, para enfrentar los retos en Marte. La misión de humana solo de ida a Marte, sería el primer paso para establecer una presencia humana permanente en el planeta», opinó.
Si bien reconocen que la misión sería necesariamente tripulada por voluntarios, Schulze-Makuch y Davies afirman que no están sugiriendo que los astronautas simplemente serán abandonados en Marte por el bien de la ciencia. A diferencia de las misiones Apolo a la Luna, ambos proponen una serie de misiones a través del tiempo suficiente para sostener la colonización a largo plazo.
«Realmente sería muy poco diferente de la situación de los primeros pobladores blancos de América del Norte, que dejaron Europa con pocas esperanzas de retorno» comenta Davies, con referencia a la propuesta de una misión marciana.
«Exploradores como Colón, Frobisher, Scott y Amundsen, aunque no se embarcaron en sus viajes con la intención de permanecer en sus destinos, se enfrentaron a enormes riesgos personales para explorar nuevas tierras, a sabiendas de que había una probabilidad significativa de que se perdieran en el intento», dijo.
Los autores proponen que los astronautas recibirían suministros de forma periódica desde la Tierra para sus necesidades básicas, pero por lo demás se esperaría que se convirtieran cada vez más, en eficientes recolectores y hábiles en la utilización de los recursos disponibles en Marte.
Finalmente se imaginan que una vez lograda la autosuficiencia, a continuación, podrían servir como un centro para un programa de colonización a gran escala.
El proyecto se iniciaría con la selección de un sitio apropiado para la colonia, preferentemente asociado a una cueva o un refugio natural , así como cerca de otros recursos , tales como agua, minerales y nutrientes.
«Marte tiene las cuevas de lava natural bastante grandes, y algunas de ellas están situadas en una baja elevación en las proximidades de el polo norte, lo que significa que existen depósitos de hielo en su interior similar a los que que contienen las cuevas de la Tierra», afirmó Schulze-Makuch.
«Cuevas de hielo para resolver las necesidades de agua y oxígeno. Marte no tiene capa de ozono y ninguna magnetosfera como blindaje, y las cuevas de hielo también nos protegerían de radiaciones ionizantes y ultravioletas.»
El artículo sugiere que, además de ofrecer a la humanidad un «bote salvavidas» en el caso de una mega catástrofe en la Tierra, una colonia de Marte serviría de plataforma para la investigación científica.
Los astro biólogos están de acuerdo que hay una probabilidad razonable de que Marte, aloje o haya alojado alguna vez vida organizada, o vida microbiana, tal vez muy por debajo de la superficie y Davies y Schulze-Makuch sugieren la instalación de una base científica en Marte, que podría brindar una oportunidad única para estudiar una forma de vida extraterrestre y un segundo registro evolutivo.
Fuente: El Universal. Aportado por Eduardo J. Carletti
Más información:
- Misión a Marte: un pasajero con pasaje sólo de ida
- A Marte con boleto de ida solamente
- Sin propulsión nuclear es difícil que el hombre viaje a Marte
- Mars500: Un viaje de 500 días a Marte
- El plan ruso para abaratar el viaje a Marte incluye un reality show
- Los rayos cósmicos impedirían al hombre viajar a Marte
- Magnetosfera artificial para astronautas
- Con un nuevo motor iónico se podrá llegar a Marte en 39 días
- El viaje de ida y vuelta a Marte se podrá hacer en 90 días
- Concluye el primer experimento para simular un vuelo espacial a Marte