El 18 de julio, en su viaje épico hacia el Cráter Endeavour, el vehículo robótico Opportunity de la NASA pasó cerca de una sospechosa roca. Apodada «Block Island» por los controladores del robot, esta roca de aspecto oscuro es muy diferente de las de su entorno, por lo que se ha ordenado al Opportunity que se desvíe de su ruta prevista unos 250 metros y dé un vistazo más de cerca
De un tamaño de aproximadamente 0,6 metros, la irregular muestra podría ser un meteorito, lo que le daría a la posibilidad al rover de llevar a cabo un análisis in situ de su composición para determinar si es o no de origen extra marciano.
La oscura roca de extraña forma está ubicada sobre el regolito, y Opportunityy hará uso de su instrumento APXS para determinar su composición
El siguiente paso es que el rover extienda su brazo robótico y presione el Particle X-Ray Spectrometer (APXS) contra la superficie de la roca. El espectrómetro, básicamente, lanzará sobre la muestra un disparo de radiación que consta de partículas alfa y rayos-X. El análisis de las partículas alfa dispersadas (después de haber rebotado en el material) revelará la masa de los elementos con los que han chocado y la emisión de rayos X también dirá mucho sobre el material.
Vamos a tener que esperar hasta que el pequeño robot haya llevado a cabo su experimento… Puede estar viejo, pero todavía está llevando a cabo algunos increíbles trabajos de ciencia.
Fuente: Astro Engine. Aportado por Eduardo J. Carletti
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