El meteorito Murchison contiene moléculas orgánicas complejas, que incluyen carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno y azufre
Se han descubierto moléculas orgánicas desconocidas hasta el momento en un meteorito de 100 kg que cayó en Australia en 1969, lo que indica que nuestro propio Sistema Solar contaba con una sopa de química orgánica de alta complejidad mucho antes de que apareciera la vida.
En un estudio reciente, los científicos analizaron el meteorito Murchison, que cayó en Murchison, cerca de Melbourne, Australia, en 1969.
Se cree que el meteoro de 100 kg se originó en los primeros días de nuestro Sistema Solar, incluso, tal vez, antes de que el Sol se formase, más o menos hace cuatro mil quinientos millones de años.
Los estudios anteriores señalaron moléculas simples
El meteorito Murchison es uno de los meteoritos más estudiadas, que ya feura reconocidas por su diversidad de química orgánica, la química de los compuestos que contienen carbono.
Sin embargo, los análisis del meteorito hasta ahora se habían dirigido todos a determinadas clases de compuestos, con énfasis en los aminoácidos por ser fuente potencial de vida en la Tierra, según el estudio publicado en la publicación norteamericana Proceedings of the National Academy of Sciences.
Ahora, por primera vez, los científicos han utilizado métodos analíticos avanzados para llevar a cabo un experimento no acotado.
Gran diversidad química
Descubrieron combinaciones muy complejas de moléculas orgánicas que incluyen hidrógeno, oxígeno, nitrógeno y azufre.
«Hemos encontrado una diversidad química muy superior a las muestras que hemos analizado hasta ahora», dijo el autor principal Philippe Schmitt-Kopplin, un químico analítico del Centro Alemán de Investigación de Salud Ambiental de Munich.
«Nunca hemos visto tal sistema orgánico complejo antes», dijo.
Según Philippe, los compuestos recientemente descubiertos en el meteorito Murchison, «pueden haber contribuido a la complejidad orgánica de la sopa primordial» que condujo al desarrollo de la vida en la Tierra.
Los resultados también sugieren que la diversidad química extraterrestre supera a la que se encuentra en la Tierra.
El meteorito probablemente pasó a través de nubes primordiales en el Sistema Solar primitivo, acumulando moléculas orgánicas en una bola de nieve afectada a lo largo del camino.
Al rastrear la secuencia de moléculas orgánicas en el meteorito, los investigadores creen que también podrán crear una línea de tiempo de su formación y transformación desde los primeros días de nuestro Sistema solar.
Sopa primordial compleja
«Este es un resultado muy interesante», dijo Geraint Lewis, un cosmólogo de la Universidad de Sydney en Australia.
«Los estudios anreriores buscaron las moléculas simples necesarios para formar la vida, pero este estudio realizó una búsqueda química general y encontré muchos elementos químicos más complejos. Así que la sopa que estaba presente en la Tierra poco después de su formación era mucho más complejo de lo que se pensaba», dijo.
«Esto probablemente tendrá importantes consecuencias en nuestra comprensión de cómo comenzó la vida en la Tierra.»
Fuente: Cosmos Magzine. Aportado por Eduardo J. Carletti
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